viernes, 4 de noviembre de 2011

Si estoy loco es por amor

Hoy comenzó la campaña electoral y los políticos han logrado que la política está muy mal vista por la ciudadanía: es un hecho. Esto es un problema para mí que creo en la democracia y también para los políticos candidatos al poder que nadie creerá sus mensajes. Mensajes que pudieran ser fantasías. Los políticos son fantásticos, y se superan a sí mismos cada día. Siempre tienen algo nuevo que decirnos para calmar nuestras ansiedades. Por el contrario, la ansiedad es mala. La ansiedad si le diera por meterse en política sería elegida: no es buena consejera. Hablo por mí, pero yo, ansioso que no político, un día de buena fe acepté relacionarme de manera definitiva con la naturaleza por una presunción psiquiátrica. Ahora vivo alejado de la gran ciudad generadora de ansiedad. Fue un acierto. Aquí, donde todo comenzó, me siento feliz. Y capaz. Claro que mi ansiedad solo me perjudicaba a mí y a mi colindancia más cercana. Eso duele: ver a los tuyos preocupados por tus incapacidades duele y duele. Pero nada se puede hacer, sin ayuda quiero decir. No habrá en el mundo nadie que hable peor de mi psiquiatra que yo, pero en el fondo no podría vivir sin ella. Ella no lo sabe, cree que lo nuestro es una historia de amor intrascendente. ¡Dios mío!, ¿qué tendrá que ver todo esto con las elecciones? Estoy perdiendo la capacidad de hilar fino. A no ser que la ansiedad me la generase la política sin darme cuenta ¿? Pues eso que le tengo que agradecer. Entonces, por el bien del pueblo hablo y no por el mío, los políticos que empiezan o sigan, no nos mientan. Que sus programas electorales estén a la altura de la comprensión de la ciudadanía, y en cualquier circunstancia, sepan superar los contratiempos todos a una, como en Fuenteovejuna. (Fuenteovejuna, de Lope de Vega, obra de contenido social y reivindicativo que representa la rebelión del pueblo ante la tiranía y las injusticias de la clase dirigente). "Donde todo comenzó no cabemos más". Considero esta aclaración necesaria para acallar las murmuraciones que hay sobre mí y mi salud mental.

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