Un día traje esta frase a un caso: "no dejes que una derrota te derrote". Y ya no recuerdo el caso ni si la frase es mía o de la vecina chismosa cuando de buena mañana barremos la acera y rajamos de todos; de una en especial. Llevaría la cara de la derrota para que la vecina chismosa me dictara la frase. Joder, dona, yo soy la derrota en el depósito de cadáveres. Derrota tenía que ser -y qué sino, dicho sea de paso-, aunque siempre aprendo la lección y no oculto la cortesía con una derrota. De cada derrota aprendí a quedarme con algo positivo. "La derrota tiene algo positivo: nunca es definitiva. En cambio, la victoria tiene algo negativo: jamás es definitiva". (José Saramago). En la vida la derrota solo te convierte en derrotado si el triunfo es tu única meta, si no aprendes la lección, si tu estima solamente se alimenta de halagos o si no haces camino al andar como nos aconsejó el poeta. Tenemos que desafiar los eternos problemas de la cultura como identidad del pueblo. La cultura, y en el mismo cielo la educación de los niños. La solución tiene que ser definitiva y no lo es desde que apareció la política con su ineficiencia reiterada y sus torpezas celebradas. Esa decisión nació de la ignorancia y el papel ya no admite borrón y cuenta nueva. (Ponga atención a lo que pierde cuando gana: recuerde que el éxito que nace del fracaso es el mejor logro). Gracias.
lunes, 30 de septiembre de 2024
domingo, 29 de septiembre de 2024
Quienquita que mañana amanezca.
La ley y los hechos deben coincidir con la verdad. Nadie obliga a formar parte de las mejores relaciones humanas, pero hay que llevarse bien. Uno elige a los amigos y la empresa a los compañeros, no hay necesidad de llamar a un intermediario de relaciones mercantiles con idénticos intereses. Esa indecencia dolió. "Los platos sucios se lavan en casa", lo decía mi güela. Los que mandan nos quieren engatusar como si acabáramos de salir del parvulario. Encontrar un político que con ejemplos solucione los problemas de la gente, incluso los suyos ahora que ya sabe dónde se metió... a quién se le ocurre llamar a un administrador de fincas, como si no hubiera abogados laboralistas. No recuerda su discurso en campaña electoral. Siempre hay una campaña electoral que ganar y una indecencia que resarcir. Si la una y la otra no fueran de la mano no existirían los políticos. Sin embargo, a mí me entretienen. Sale más barato el circo, pero el circo entretiene menos. Y aparece la pregunta: ¿Qué me dicen ustedes del miedo que provoca la mala conciencia y el sabor a hiel en la boca? Tan terco que se empeñó en hallar una mancha en un grano de arena. Es malo negar la verdad para atraer a los nuestros y peor delegar la autoridad en un administrador de fincas. (Qué poco has sufrido si crees que has vencido cuando todavía no comenzó la trifulca). Gracias.
sábado, 28 de septiembre de 2024
Hacia el final de todo.
Por los mentideros del pueblo se comenta que unos y otras desafían las leyes de la concertación social. Están poseídos por un sociópata bien integrado en la sociedad. (Inventa un camino y reza lo que sepas para que no te encuentre. Lo lleva mal).
Una reclamación laboral ajustada a derecho obtiene como respuesta un insulto a la inteligencia. Merecerá la pena. (A veces uno no sabe lo que gana hasta que lo pierde). No respetan la ley y lo que es peor, la justicia. Cada cual sabe lo que hace, lo que siente y algún día, quizá, lo que le atormenta. Vivo una paranoia, una obsesión, lo que sea peor, o un flipe que mi mente absurda no llega a comprender. Me niego a que mi esquizofrenia ordene (como si con mi ordenador no tuviera bastante) mi conducta social (si así se le puede llamar) reforzada por la dama que no me deja ir con pastillitas de colores y una palmadita en la espalda (todo por volver a verme). Salir de casa y sobrevivir a un ataque de pánico es mi cotidianidad. Al margen de lo que siento (si en realidad es lo que siento), nuestro sistema nervioso se ve alterado con síntomas de ansiedad, agresividad, aumento del ritmo cardíaco y, por supuesto, la imposibilidad de mantener la calma ante el abuso de autoridad. (Confieso ser un sociópata bien integrado en la sociedad que poco puedo hacer porque Dios inició el juicio y dictó la sentencia). Gracias.
viernes, 27 de septiembre de 2024
Ayúdese y le ayudará.
Así como la política de los malos políticos gusta de las metáforas, así la vida llana gusta de alegorías a través de las cuales expresa la realidad por medio de imágenes totalmente diferentes a lo que se pretende explicar. Los políticos más ignorantes solo ven lo que esconden los ojos de los ciegos. Cada pensamiento nuestro es real. Nuestros pensamientos irradian lo que hay en nuestro interior, y eso incluye todas las cosas buenas y las que no lo son. Si sabes lo que quieres lo conviertes en tu principal objetivo y lo traes a tu vida a través de los sentimientos sobre la base de la ley de la atracción. El mejor sentimiento atrae una mano tendida al conocimiento. Atrae todo lo que un abrazo sea capaz de abrazar. Atrae aquello que necesitamos. Prestar atención a nuestros mejores sentimientos nos da confianza y logra que nos respetemos más, además de evitar que cometamos la mayor estupidez... Pensemos en los demás... para no apagar nuestra excelsa amargura con labios difuntos... (¿Usted piensa en los demás? Sin guía espiritual se desacredita y desde el descrédito no será capaz de entenderse con los demás. Usted necesita a los demás. ¿Tan difícil es entender que se trata de actuar con las mejores intenciones y llevarlas al papel? Si piensa lo que siente verá las cosas de otra manera y no será propenso al fracaso. Ayúdese y le ayudará). Gracias.
jueves, 26 de septiembre de 2024
Insurrección.
"Con el IPC de agosto, los precios han sufrido severas subidas durante los últimos tres años, con un incremento acumulado del 20%, tras registrar alzas del 3,3% en 2021, del 10,5% en 2022, del 2,6% en 2023 y el 2,3% en 2024. Estas cifras son superiores a las registradas por los salarios, lo que ha provocado una pérdida de poder adquisitivo en las familias". (El País).
Para los políticos como sociedad somos el resultado que no afecta a sus intereses ni al voto, hasta las próximas elecciones. Las familias están rotas con la mente dañada en su salud. Somos víctimas de una realidad callada que nos destroza la vida. Y cómo duele no poder gozar de la vida ni aspirar al derecho humano de ser felices. Somos espectadores, no protagonistas. Y no menciono una noticia que breve saldrá a la luz con la cara de la sumisión. Las familias no llegan a fin de mes (esa es la noticia y no otra). Las familias permanecen a la espera de "algo es algo" que les permita cambiar su amarga existencia; que les permita abrigar esperanzas y no emocionarse falsamente. La sociedad humilde no tiene representantes políticos acorde a sus necesidades. No tenemos líderes comprometidos con sus ideales. El colectivo laboral no está sindicado y ya no existe clase media. Esta patria no tiene intelectualidad reivindicativa, ni un estudiantado universitario capaz de tomar las calles. La sociedad de este país no puede liberarse de la barbarie de sus mandamases. (Los que pagamos sus excesos llamémonos a la insurrección para lo que puede sobrevenir, que podría ser tan inmenso que acabáramos todos en el cementerio). Gracias.
miércoles, 25 de septiembre de 2024
Así es él.
No sabe llevar sus relaciones y utiliza el cajón de los afectos para guardar los secretos de amor a sus amigos y los agravios a los hijos de sus enemigos. Pero como tampoco sabe colocar a unos y a otros se embrollan y acaban en el estercolero. En realidad no quiere cambiar las cosas, se conforma, siempre se conforma con las migajas. Disimula su cobardía y se hace la víctima para que los demás se sientan culpables. Secretamente huye del sagrado deber de ser útil a la sociedad. Hoy traigo a de soslayo el más o el menos valioso activo que tiene un partido político. Trágicamente, es el más valioso aunque no sabe que los árboles mueren de pie (no lo sabe, pero pronto lo sabrá). Para entendernos empecemos por recordar las frases que esparce cuando se presenta a las elecciones: "confía en mí". Y, seguidamente: "no te defraudaré". A pesar de que ignora si es izquierdista, derechista o el del ático de una asociación de vecinos. "Creo que puedo hacer mucho por el pueblo, creo en el voto de la mayoría". Si gana. Se conforma con ganar y auxiliar a los nuestros. El resultado de las urnas es sagrado, como la necesidad del pueblo. Parafraseemos a Facundo Cabral: "Si los prepotentes supieran qué buen negocio es ser humildes, serían humildes aunque solo sea por negocio". (Al resplandor de la democracia cuando ciega con sus resultados). Gracias.
martes, 24 de septiembre de 2024
La culpa te destruirá.
Valorar el comportamiento de algunos líderes políticos (pido perdón por lo de líderes políticos, politicastros, quise decir), es aceptar decisiones sin principios. Y eso es individual, no social. Si es social, quizá sea socialista, si no, pierde atractivo para mí. Un socialista defiende el mejor activo de la empresa, los trabajadores, y no falla contrario a sus derechos laborales. Eso sería negar la herencia de la lucha obrera que tanta sangre derramó por las cunetas. Sin embargo, para no darme la razón, porque soy de mucho darme la razón, muerto Eugenio, consulté libros y pregunté por aquí y por allá y fue inútil: nadie sabe de dónde viene esta nueva camarilla de socialistas (discúlpenme los socialistas con ideales de corazón, aún no fui capaz de ponerles un nombre que conjugue con el desprecio que sienten por los trabajadores) que arremete contra la salud mental de los trabajadores, además de meterles el hambre en casa. Aparecen, abren el cajón, se ponen un buen sueldo y los demás a conformarse con el placer de haberles conocido. Estos politicastros son impredecibles, por lo tanto, prescindibles. (Ayer cité el rechazo y etcétera como sentimientos muy fuertes, pero no aclaré que el sentimiento de culpa que te destruirá nació de la chulería que te animó a tomar una decisión sabiendo de antemano que era pobreza laboral para los trabajadores). Gracias.
lunes, 23 de septiembre de 2024
Bien lo hiciste, ahora léeme.
Créanme: Cada día me cuesta más adentrarme en Les Seniaes en busca de buenos recuerdos. Siento un malestar general: la rodilla, la espalda... El ruido de la cabeza peor, gracias. Creerán ustedes que es natural, dolores de la edad, o que vaya a cantar boleros al camposanto. Joder, dona, tantos años compartiendo mi vida entera y a la hora de la verdad ni una lágrima. Claro que los años pasan y los que cantábamos boleros ahora bailamos tangos tristes. Bah, algo de razón tienen, no mucha pero algo tienen, soy un resiliente en potencia y no controlo mis emociones. Para que la vida sea interesante tiene que tener intereses ocultos. Yo los tengo, pero las culpas de otros. Claro. El viernes en el hospital le hicieron a mi esposa una prueba sobre la pronación del brazo y... Cómo, si no les tengo al corriente sobre el brazo casi roto de mi esposa: pues sigue igual o peor, no me cuenta, solo me obliga a atender las tareas de casa. Un paisano, yo, fregando y lavando los trapos sucios en el lavadero municipal. Ay, lavar los trapos sucios es lo único que hago con gusto. (Esta realidad irrefutable, con esos calvarios violentos alimentando la monserga de todas las penas no sé cómo acabará. Vivo la indigencia de los espacios vivientes. El rechazo, el odio, la ira, son sentimientos muy fuertes, pero la culpa, ay, la culpa es el sentimiento que te destruirá). Gracias.
domingo, 22 de septiembre de 2024
Es otoño y Eugenio vive.
Me gusta evidenciar los valores cuando la persona de quien hablo aún vive y entiende que su aporte en cualquier ámbito es reconocido. Pero aborrezco la hipocresía de decir cosas positivas acerca de quien no las merece. Son pensares con los que todos estamos de acuerdo. Hoy quiero hablar de un ser humano, admirable ser humano, de Eugenio, por ejemplo. Siempre trato de exaltarlo porque la gratitud es un incentivo que ayuda a ser mejores personas. Hablo mucho de ser mejores. (Ojalá que no sea remordimiento). Digo Eugenio porque aun suponiéndole defectos, su humanidad es superior. Si utilizáramos una balanza pesaría más su solidaridad y tanta sabiduría que cualquier conveniencia. Y me remito a esta mañana tomando café: Me dijo que no estaba enfermo, que solo tiene una condición que especialmente celebraba: "estoy vivo". Eugenio, vive. Qué engañado me tenía. Y tiene razón. La vida es un hecho que hay que festejar en cualquier circunstancia, un día, hoy. Existen causas para celebrar estar vivo, como conocer a una persona, apreciar sus valores y con el tiempo llegar a quererla. Lo dice Eugenio. Mi amigo es especial y discreto: vive en mí. Un día al azahar tomamos café y me cuenta historias de antes. De su vida lo que realmente importa, es decir, lo que hizo, no lo que no hizo y no hará. Me entristece recordar a Eugenio en otoño. Estación jodida que hoy irrumpe para los mayores. Otoño lluvioso y frío. La muerte es fría. Eugenio es un hombre sabio que deshoja los años exprimiéndolos hasta el límite. Hablo de Eugenio y me siento triste. Quizá sea porque callo más de lo que siento y digo: hasta la muerte todo es vida. Pactaría con un Dios comprometido otra vida. Una vida que, a pesar de todo, me permitiera conservar una sonrisa en los labios. Joder, hace tiempo que no río. Reír adorna la vida. Eugenio lo hace sencillo, se puede decir que es un hombre que construyó su vida a fuerza de esperanza y trabajo. Eugenio sabe llevar aliento a sus penas y a una aislada dolencia. Se puede y puedo decir mucho de él, pero nada tan, tan importante como que sigue vivo en mí. Hoy que entra el otoño me adentraré en Les Seniaes y echaré unas risas en honor a la amistad. Por Eugenio. Gracias.
sábado, 21 de septiembre de 2024
Ustedes como yo.
El comentario que hoy traigo a de soslayo es para sentarse y leerlo con una copa de vino en la mano. El vino que sea bueno porque el comentario es malo, como vislumbrar unos ojos de color negro azabache que lloran lágrimas de ausencia fingidas. Es un comentario malo, pero no por la moraleja que no tiene... Uf, vaya lío. Tampoco es un comentario malo, es una noticia fidedigna y empieza con una pregunta: ¿Ustedes sabían que nos quedan tres meses para entrar en el primer cuarto de siglo XXI? Claro, ustedes como yo bastante tenemos con llegar a final de mes y cabrearnos con esos politicastros que gobiernan. Pues yo, además, tengo otros dos cuartos de siglo (XX) en la mochila. No lo cuento para que la que no debe ser nombrada lleve al tinte el vestido de los entierros, no le daré ese gusto. Dejo al margen las salidas de pata de banco, las alusiones y el libre albedrío: saben que es verdad. La verdad es esa y la comprobé en el calendario. En poco más de tres meses entramos en el primer cuarto de siglo XXI. Así que si tienen una dolencia sospechosa o algo que les altere el sueño vayan al médico y háganse un chequeo integral. O no, no vayan porque el médico no vino ni vendrá: me cuentan que tiene consulta abierta en Alemania. Sigan mi consejo: tómense la vida en serio y confíen su salud a un santero espiritual o a cualquier Dios. Gracias.
viernes, 20 de septiembre de 2024
Compren y lean libros.
"Atención, este es un spot publicitario. Todo buen lector de libros sabe que no es lo mismo comprarlos que leerlos. He hecho la prueba con amigos que son lectores aplicados y disponen de amplia biblioteca y, tras someterlos a un hábil interrogatorio, la mayoría ha acabado confesando que, como media, no han leído un tercio de volúmenes o lo han hecho por encima. Sin embargo, les proporciona seguridad tenerlos ahí a mano, sospechando al menos los secretos que guardan, manoseándolos a cada tanto, abriéndolos a veces al albur y leyendo un párrafo suelto o un capítulo. De lo que se concluye que los libros son para todo eso, leerlos, tenerlos cerca y hojearlos, una pasión suave, con raptos de intensidad, que ninguna forma virtual de enlatado que no sea el papel puede sustituir. Amigo lector si no entiende esto no se alarme, nadie es perfecto". (El asomau).
Todos tendríamos que tener una biblioteca en casa con libros leídos y releídos por aquello de Ramón de Campoamor: "Todo es según el color del cristal con que se mira". (Yo leo al capricho de mi comprensión lectora). Se puede tener una biblioteca con libros echados a perder de moho. Se puede tener libros de distintos autores para alzar el ordenador porque no damos la talla. Se puede comprar libros y no leerlos, al menos las editoriales y las librerías no quebrarán. Incluso se puede tener una Biblioteca Municipal cerrada al público cuarenta años. Este no es un spot publicitario, es una amenaza, pero no llamen a la policía. (Este es un consejo. Háganse un favor: los libros son sabios y ninguno huele igual. Compren y lean libros). Gracias.
jueves, 19 de septiembre de 2024
Para ser Musa antes hay que ser mujer.
Una mujer alardea de haber descubierto que la sintaxis produce tal desbarajuste en la palabra que la incapacita para formar oraciones y expresar conceptos. Un autor que desatiende la sintaxis escribe al dictado, no tiene estilo de expresión asertivo. Una mujer por ser Musa de poetas confiaría su alma al diablo. Si fuera cierto tendría que ser amante de poetas y saber leer entrelíneas. La palabra del poeta si se explica aclara las dudas y vence el miedo. Su fuerza provoca ese hormigueo peculiar en el estómago que sienten los enamorados. La palabra, como vínculo verbal es la portadora cognitiva que da esperanza al cuerpo y silencia los ruidos cuando el no poder conciliar el sueño desbarata la psique. Un poeta aconsejaría a esa mujer no lanzar al viento que la sintaxis incapacita la palabra si en algo valora su vida emocional. De lejos, quizá todo gire en torno a la sintaxis y las formas de combinar las palabras por orden gramatical. De cerca el ingenio de un poeta que emociona no se estudia: su palabra podría ser la peor medicina si impulsa el desequilibrio mental de una mujer -o una sierpe- y saca a la luz su doblez. Un poeta sereno espera que llegue la hora para tocar el cielo en la noche desvelada. (Ayer ninguneando el gusto de la soledad pensé en ti y quise regalarte una canción y ya ves: palabras, solo palabras. Al igual que tú: ni mujer). Gracias.
miércoles, 18 de septiembre de 2024
Peregrina de la vida y el amor.
martes, 17 de septiembre de 2024
Una joven de arcoíris vestida.
Anoche evoqué a una joven de arcoíris vestida en la terraza del bar donde abrazados cantábamos romances y algún tango triste. Tomábamos café, reíamos y urdíamos estrategias políticas valerosas para salir del vecindario y entrar por la puerta de atrás al porvenir que la esperaba. Yo le cuchicheaba y ella ilusionada escuchaba. Le anunciaba un futuro seductor. Éramos grandes amigos y fieles compañeros. También nos regalábamos miradas de ensueño para alejarnos de la muerte. Nada que ver con la mirada que ayer me clavó en el corazón al doblar la esquina. Mucho hablamos en el bar de nuestras nostalgias, y que poco duró una promesa de amor. Yo pensaba que ella me quería. Tal desdicha guarda relación con una carta con la que me disculpaba como amante vencido: "perdóname por escribirte esta carta que no te enviaré, porque no te he vuelto a ver o porque después de amarte tanto el ordenador que me ordena no te quiere herir". Ayer tarde una joven de arcoíris vestida me miró de manera que podía describir como la antítesis de lo que el amor y la santa poesía aconseja. En adelante, pase lo que pase, no estaré ahí. (Ni el dueño del partido político que ayudaste a crear -que sigue muriendo por no saber leer entrelíneas su futuro-, cuando asomes por la puerta con tus alegrías y tus tristezas porque él, cobarde, huirá escaleras arriba). Gracias.
lunes, 16 de septiembre de 2024
"Eso no lo llevo yo".
El pasado jueves fui al ayuntamiento del Pueblo de Patricia y no había nadie. Alguien murió, pensé. Me acerqué al bar de la esquina y pregunté si sabían por qué no había nadie en el ayuntamiento. Una joven me respondió que la administrativa que había en el ayuntamiento era una señora que estaba llorando en la barra, la señaló con el dedo. Sí, alguien murió. Pues no, la joven me aseguró que lloraba porque es la única administrativa que hay en el ayuntamiento y de tanto tanto de todo había dado en loco. Probe. Ni secretario municipal, solo ella para ocuparse administrativamente de un pueblo de 1.000 habitantes, muerto arriba muerto abajo. Por no haber no había ni alcaldes ni concejales, lo que me hace pensar que Pedro Sánchez no convocó elecciones en el Pueblo de Patricia, ni la ministra de Hacienda y Función Pública ofertas de empleo. En fin, regresé a la sala de espera y al poco llegó una señora rubia de bote, abrió la puerta del negociado, se sentó ante el ordenador y a lo suyo. Pero lo suyo también era mío y llamé a la puerta y sin levantar la cabeza del teclado: "pasa". Pasé con miedo (su cara es un experimento fallido de bótox) y le dije que quería pintar la casa y... Y en esos puntos selló mis labios para decirme que eso no lo llevaba ella. (Si no ella quién: otro misterio por resolver). Se lo volví a preguntar porque nunca se sabe y me dio la misma respuesta: "Eso no lo llevo yo". Entonces fui a casa saqué del armario la cara de los entierros, me hice notar, y al ver de mis ojos la mirada donjuán le vino a la memoria otros tiempos. Ahí se espabiló y le repetí la pregunta como a los locos en busca de otra respuesta: "Eso no lo llevo yo". No está loca, cínicamente finge la locura. (Si alguien sabe quién lleva "eso" en el ayuntamiento por favor que lo diga antes de que entre el invierno y con él el orbayu y me meta el agua en casa). Gracias.
domingo, 15 de septiembre de 2024
Caricia perdida.
Antes que Newton, ya toda acción conllevaba una reacción; y antes de él, todo voz causaba un eco. Y antes de todo existía el amor. Si existía el amor, la poesía (y, desgraciadamente, Benjamín Prado: "todo lo que no es poesía, cajero automático"). Después ya fue apareciendo el desamor, la felonía, el matón de barrio y la puñalada por la espalda (lo de la puñalada no lo sé de fijo). Los torpes de entendederas no entienden que casi todo está inventado y viene de antes (siempre hay un antes y un después). Otras angustias y lamentos todavía perduran en el mismo estado al paso del tiempo. Qué lástima. Asumiendo como válida la medición de Eratóstenes por puro complejo homérico y dejando a un lado la discusión arqueológica de si es en el estrato VI o en el VII donde podemos ubicar a la mítica Troya, reconozcamos que a tres milenios de distancia, no solo la historia sirvió de base al informe fundacional de aquello que con el tiempo devino en llamarse lo que hoy en día se sigue llamando, melancolía, sin importar país, gobierno, partido político y etcétera, pues el poder es el mismo y quienes lo ejercen (la historia se repite) son tan penosos como una caricia al viento. Caricia perdida que nunca acariciará. Por eso no importan desgracias, animadversiones, odios y rencores, porque la historia siempre será la misma... (y el resultado también). Gracias.
sábado, 14 de septiembre de 2024
Irrealidad fantasmal.
La esperanza de un náufrago en una isla desierta cuando tira una botella al mar con un mensaje de auxilio, es la misma que tiene de soslayo cuando hace un llamado de atención para dar solución a un problema. La esperanza no es capaz de darle paz a la psique (quien lee de soslayo sabe que soy persona de no cantar siempre la verdad, pero como me entretiene, sigo dándole a la rueda que rueda y rueda). El problema está matando y enterrado a una buena persona y no lo sabe. Todo está pensado, tasados los beneficios y escrito, sin embargo, una buena persona no se fía y actúa como si estuviera ausente y no imagina que en ese plan pierde, de hecho ya perdió. Le calló encima la realidad por no optimizar los recursos humanos. Un problema se suma a otros cuya solución pasa exclusivamente por echarles una gota de voluntad política, pero no, y además tomó la sorprendente decisión de no dar la cara. Cuando la voluntad política solapa capas de ignorancia, galbana, y entierra un problema para no darle solución, alcanza el tamaño de inmanejable. Un problema sin solución sigue creciendo y de obvio pasó a indiscutible hasta que Dios lo vio. Dios tampoco tiene voluntad y como a él la política le queda grande. Un político sin voluntad política no se toma en serio su trabajo y su destino es el olvido. (Un político vive una irrealidad fantasmal). Gracias.
viernes, 13 de septiembre de 2024
Remordimiento.
Su plan no surtió efecto y es una pena, porque ahora, y además, lo manejan iletrados necios, torpes útiles e inútiles listillos. Sentenciado sin acusación ni derecho a la defensa, vilipendiado por razones que poco a poco van desnudando el tiempo, al salir de casa no sabe a dónde ir. Al monte o a la playa. A trabajar no, no porque lo humillan y él no tiene madera de santo, ni la cara tan dura como para poner la otra mejilla. Hizo lo que creyó justo, según su confesor, y la vida no tiene que ver con la fe. Uno no se puede fiar ni de Dios. Del confesor y no de Dios. Hizo mal y lo sabe. Tendrá tiempo para arrepentirse toda una vida. Si al menos se llevara mejor consigo mismo: está solo y se siente solo. Su vida va para ranchera mexicana. No tardará Javier Solís o Jorge Negrete en cantarla por las esquinas. (No te preocupes si no logras sobresalir en esta vida, es señal de que fuiste llamado a encajar y sobresalir en otra vida. Que no te confunda un mal consejo, cada lección asimilada es lo que te asegurará no volver a equivocarte por la misma causa. No creas que todo está perdido, ni que eso o lo otro es un sí o un no. Todo es relativo: será definitivo cuando tu conciencia compruebe tus verdaderas intenciones y te lleve donde solo ella te puede llevar. Mientras, intenta salir más o menos cabal de ese manicomio donde tu confesor de buena fe te metió). Gracias.
jueves, 12 de septiembre de 2024
¿Por qué no mirar a todas?
Desde que me conozco hace mucho, mucho tiempo, no me he visto derramarme en elogios por ningún espurio líder político; no me he visto escribir, sino al bendito amor, a la defensa de los derechos civiles, laborales, reclamo de obligaciones; no me he visto apoyando a maltratadores de ningún tipo, de género, ¡cobardes!; no me he visto alejado de la lucha solidaria contra los peores empresarios amigos de Rajoy y los aplicados aprendices de las administraciones públicas; no me he visto negar causas perdidas, esas me apasionan especialmente. Soy un insurrecto y mi paciencia no conoce límites. Si sigo me vomito. Joder, dona: ¿A qué viene tanta chulería? Ay, me quiero demasiado. (Oye, para estar tienes que incluir compañerismo en la vida cotidiana. Te enseñé, pero no a cambiar las partidas presupuestarias ni a mover los registros que dejan rastro, no sé si me entiendes... La mano que da de comer. Gracias. De nada). La enemistad, el abuso de poder y tanto discrimen. (Quiérete como yo me quiero). De querernos depende la estabilidad que da paz al alma. Salud mental. La ignorancia impide florecer la fraternidad. Ponte en valor. Reconoce derechos y no prestes atención a quien se le caen las flechas al andar. Llegarán esas, las consecuencias, y perderemos todos, pero sí, unos más que otros. (Uno ya solo mira a las personas que ama... ¿Por qué no mirar a todas? Porque todas no son más que el velo que se echa a un lado para clavar el puñal por la espalda). Gracias.
miércoles, 11 de septiembre de 2024
José Luis Escrivá.
La experiencia es una excelente escuela y la matrícula es gratis, no cuesta ni una peseta, lástima que no permitan acceder a ella antes de ser muy mayores. Hoy día llegar a ser muy mayores es casi un milagro. El nuevo Gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá, es partidario de retrasar la edad de jubilación hasta los 74 años... Ah, que no lo sabían... pues sí. Los presidentes de gobiernos para agradecer el agotador servicio prestado por sus ministros antes de entregarles el finiquito ya negociaron su inmediato destino: ¡Vaya, una embajada!, o una puerta giratoria (hagan memoria). Pero gobernar el Banco de España un ministro que nunca ocultó la intención de alargar la vida laboral hasta los 74 años, o sea, hasta la muerte para no pagar pensiones ni aprender la experiencia necesaria para dar consejos, eso jamás ocurrió. Ojo, yo estoy jubilado, no va conmigo, pero pienso en mis hijas y en las hijas de los demás, y en los que están echando cuentas para jubilarse. (Probes). No hay derecho. Culpables de nuestra ignorancia o simplemente confiados, con dolor y un sabor amargo como aquel aceite de ricino de nuestra infancia, ustedes y no yo (yo estoy jubilado), pueden morirse cuando quieran de lo que quieran antes de cumplir esa edad. Pienso que la raya roja que pintan donde más les conviene la pintarán (oh, casualidad) exactamente a los 74 años. (Qué pasará si la pisan, sinceramente no lo sé, pero si tengo que apostar apostaría por la de la guadaña). Gracias.
martes, 10 de septiembre de 2024
Muñeco vudú, ¿estás triste?
"A veces tienes la tentación de pensar que alguien posee un muñeco con tu cara y se divierte clavando alfileres en las zonas más sensibles, incluidas las que no están a la vista. Y da igual que hagas balance de daños y pistas para tratar de averiguar quién o quienes son los autores de los alfilerazos mojados en magia negra porque lo más probable es que no haya antídoto contra las maldades que vienen mal dadas". (Tino Pertierra).
¿El muñeco vudú está triste? Vaya, lo lamento. Pero quién no está, cuanto menos triste en tiempos de manicomio y muerte.
El señor Tino Pertierra me lee el pensamiento y aclara algunas dudas, a pesar de que no da nombres, que en realidad es lo único que quiero. Gracias, Tino, pero podías esforzarte un poco más y dar nombres: ¿Quién o quienes, y ante Dios por qué a mí? Enfilado me tienen, todo mi cuerpo es un colador ensangrentado como cuando de guaje metía yerba nel payar. Quiero saber quién o quienes para someterlos a la voluntad de Dios. O a la del diablo para que a espaldas de mí los guie escaleras arriba hasta el tejado y después de clavarles sus propios alfileres mojados en magia negra los tire a la calle como despojos. Sus acciones son cobardes. Los peores empresarios amigos de Rajoy y los sagaces de la administración pública condenan a la explotación a sus trabajadores en el mejor de los casos, en el peor con un salario de muerte. (Tus decisiones son vida o muerte. Recapacita, y si algo bueno hay en ti aprovéchalo. Tengo el antídoto contra las maldades. No te traiciones). Gracias.
lunes, 9 de septiembre de 2024
Sigo sin saber a qué viene esto.
Ayer dejé el domingo en misa porque me levantó un dolor de cabeza horrible el no saber, me mata el no saber, además, me vi rogando a Dios para no caer en pecado. Casi santo, me vencería el remordimiento. A pesar de que bajé el volumen a mis oraciones. La vida tiene margen para creer en nosotros mismos y lograr nuestros sueños. Y claro que a veces las cosas no salen como queremos, pero qué importa que un sabelotodo nos haga daño si nuestro camino tiene lumbre (nada ocurre por casualidad). ¿Y qué si no podemos controlar tanta desdicha? Paciencia, no dejemos que la desdicha se convierta en hábito, especialmente si no podemos evitarla: solo cabe esperar con paciencia que el desenlace sea favorable. Y si es desfavorable conformarnos nunca. Tengamos el aplomo de enfrentarnos a las decisiones que se avecinan: tienen solución, y explicación. Elijamos sonreír para que lágrimas desgarradoraras no nos derroten. Que una sonrisa sea nuestra arma contra los peores propósitos: es la mejor medicina. Elijamos sonreír ante el dolor y perdamos el miedo a los prejuicios porque el problema de otro es y no nuestro. Somos la suma de nuestras decisiones, y con nuestras incuestionables razones y la decisión correcta, conseguiremos aquello por lo que tanto luchamos. Hasta la victoria siempre. Naturalmente, allí nos encontraremos. Gracias.
domingo, 8 de septiembre de 2024
No sé a qué viene esto.
Es preciso saber con total seguridad los pormenores que se quieren cambiar, así como los motivos por los cuales se desea realizar. Si no tenemos claro en objetivo, en fin, se nos podría complicar el asunto a la hora de llevarlo a cabo, sobre todo si pasamos por momentos de profunda indecisión. Conviene parar y recordar lo que aprendimos de la vida, y lo que sentimos, también las decepciones. El porvenir a veces viene (el azahar es un milagro de la creación) y preguntarnos por qué no iba a volver ahora. Los problemas son parte de la vida y son inevitables, pero podemos elegir cómo reaccionar ante ellos. La vida da esa opción. Y no huyamos escaleras arriba porque somos responsables de las decisiones que tomamos, y algunas traen consecuencias dolorosas. Tenemos que creer en nosotros y estar abiertos a los demás: no sabemos qué sucederá si vamos dejando muertos sin enterrar por el camino. No sacrifiquemos el presente por un futuro incierto. Y llega la aclaración al texto: mira si estamos conectados que, sin habernos visto, sentados frente a frente, nos miramos, nos caímos mal y sin saber qué decirnos algo bueno echó a andar. Confía en ti, y en mí, si tus paranoias te lo permiten: no habrá una segunda oportunidad. Pero sí decides pedirle a este domingo abierto a la reconciliación bendiciones sin condiciones... (Vuelvo mañana). Gracias.
sábado, 7 de septiembre de 2024
El hazmerreír de Europa.
Abjurar de la existencia de España, como un niño malcriado por la vía de no mentarla, ofende la razón. Este colapso lleva España al furgón de cola de la Unión Europea. Faltan jueces, eso es evidente, seguramente inversión y tal vez, algunas leyes pues igual no estaría mal revisarlas. No existen medidores neutrales para calibrar las cosas que nos molestan. Y vaya por delante que, en algunas cuestiones, tal vez yo mismo acumule un exceso de susceptibilidad. No lo niego. Pero es que este verano, en mitad de la ópera bufa que fue la tocata y fuga de Puigdemont, anduve pegado a la radio para no perderme detalle; desde la filípica del expresident ante sus incondicionales hasta el ridículo policial, burlados los mossos por un montaje de sombreros de paja, digno de figurar en un "sketch" de la Pantera Rosa. (Carlas Francino).
De acuerdo señor Francino, pero hay más: si pregunta a un residente de la Unión Europea por dos españoles mundialmente conocidos en la actualidad, sin duda, le responderá: Pedro Sánchez y Carlas Puigdemont. Pedro Sánchez por sacarnos de la taciturna indiferencia en la que nos encontrábamos, y Carlas Puigdemont por ridiculizar de manera impune a la judicatura. En España, si hablamos de cumplir y hacer cumplir la ley, somos el hazmerreír de Europa. Aquí no existe la Justicia, existen leyes que no se cumplen. Burla hizo y sigue haciendo Carlas Puigdemont con la ley y los magistrados españoles. Y sí, faltan jueces, pero con la politización de la Justicia y la judicialización de la política quizá nos arreglamos con los que hay. Gracias.
viernes, 6 de septiembre de 2024
Tras la puerta cerrada.
El "jefe" confunde el hambre con las ganas de comer y mete la penuria en casa de una malmatada. Los que pierden siguen perdiendo porque los que ganan mandan y quieren seguir ganando. Está en boca del pueblo. No digo amigos, digo llevarse bien. ¿Cuánto cuesta llevarse bien? Hablo de la colindancia cercana, no de mí: yo no confundo el hambre con las ganas de comer. Ni quiero una escalera para huir, tengo bicicleta y estoy jubilado. Los jubilados más o menos llegamos a final de mes. Llevarse bien con la colindancia cercana tiene valor, y un peso cualitativo al sentirse seguro: ¿Una pizca de sal? Sí. O llamar al SAMUR. La cultura se lleva bien con toda la colindancia. Mi güela no se llevaba bien con toda la colindancia (y viceversa), pero no dio con la puerta en las narices a nadie (mi güela sabía que cuesta calderilla llevarse bien). Y en ese plan no le falto (ni faltó a nadie) una mano y un brazo pegado a un hombro. Uno queda indefenso cuando cierra la puerta al colindante. Una puerta abierta a la necesidad te salva la vida. (El tiempo que empleamos sabiamente absorbe sosiego que luego esparce en la psique. Los años revelan con una gota de colirio lo bueno y lo malo destacando de manera inequívoca quien somos. Y las cicatrices nos dicen dónde hemos estado, pero no a donde vamos... Ir solos o acompañados es decisión personal). Gracias.
jueves, 5 de septiembre de 2024
Sigo y no me caso.
Sigo y no me caso diciendo lo que dije ayer: Aplíquense las leyes. Cumplir y hacer cumplir las leyes. Porque entonces será tan sencilla nuestra relación como mirarme en tus ojos, respirar tus silencios, dormirme con tu voz, solo que aquí, aplicar las leyes cuando hacerlo implica a sectores sensibles del poder político, mediático y/o asambleas comprometidas de antemano con mentes pequeñas y procedimientos ocultos a la trasparencia, no pueden ver ni creer lo que serás capaz de concebir. La gobernabilidad se ha convertido en una utopía, una quimera y no de amor que esa sí es buena si se realizan frente al mar y orbaya. De corrupción político/empresarial hablé ayer, o eso creo, pero da igual, la política y la corrupción siempre van de la mano de políticos y empresarios, que a fin de cuentas, y si añadimos a los amigos de la infancia, apaga y vámonos. Mira tú hasta dónde hemos llegado con esa politiquería de entregas y bajezas, de poca ética y prácticas "desinteresadas", lo que ha incitado a tantos a llegar donde han llegado: a la cloaca del ser y su ruindad, a la normalización caótica e infame del descaro y la estafa. De forma lamentable la confianza de la ciudadanía en la política solo se puede ver a través del visor censor de los políticos y mientras no entre la UDEF hasta la cocina la democracia está en serio peligro. Aplíquense las leyes. Gracias.
miércoles, 4 de septiembre de 2024
Aplíquense las leyes.
Si los políticos lograsen en los cuatro años de legislatura cumplir y hacer cumplir las leyes que rigen habrán realizado casi el 100% de su trabajo, promesas incluidas ("confía en mí"). Alguien dirá que según las encuestas los principales problemas de la ciudadanía no son asunto de derecho, sino de llegar a fin de mes, educación y sanidad pública, "vuelva usted mañana" en las administraciones por falta de personal, corrupción política y así, quien así argumente tiene algo de razón pero poca. Y es que la esperanza de tener un romance de gesta que haga posible la superación de todos nuestros problemas comienza con voluntad política y termina con la aplicación de la ley. Ustedes lo tienen fácil, aprovechen ahora, en su luna de miel de gasto controlado, a pesar de que se dejan llevar por la ignorancia y la terquedad (tengo pruebas). Cumplan y hagan cumplir la ley, no se pringuen, o yacerán con mal cuerpo por obligarse a defraudar al Síndic de Greuges. "Nunca llovió que no escampara". Sentencia que se emplea para transmitir paciencia cuando algo va mal y puede ir peor, que tanto repetía mi güela. Este país medio arruinado por la insensatez de sus políticos, este país, señores políticos, aún tiene remedio: cumplan y hagan cumplir la ley. También decía mi güela que la solución a casi todos los problemas está en uno mismo. Aplíquense las leyes. Gracias.
martes, 3 de septiembre de 2024
¿Tanto cuesta leer un libro?
Cuentan que de muy joven José Saramago se sentaba en la última fila del cine, fila asquerosa con butacas destartaladas, y veía la película que todos admiraban bajo otro prisma triangular. Decía que esta circunstancia había definido su curiosidad intelectual, porque a partir de entonces decidió que a las cosas "había que darles la vuelta" para desafiar sus apariencias.
Desde atrás la película se ve diferente. Desde la lejanía cercana. Desde la atenta mirada de soslayo. Desde el silencio y el abandono también se desafían las apariencias y se define la curiosidad intelectual. Por tanto, se recomienda ver las cosas bajo otro prisma triangular. Sigamos el consejo de José Saramago y no salgamos huyendo escaleras arriba con las peores apariencias: es un acto de cobardía. Por las escaleras no solo se sube, tarde o temprano también se baja. Saramago es un libro abierto al conocimiento que analiza los problemas y les da solución desde el pensamiento crítico. Quien aparenta ante los suyos será el primero que pagará por no ser quien es y dar la apariencia de la peor cobardía. No tardará su conciencia en enjuiciarlo y condenarlo a un silencioso tormento entre muros infranqueables. Una persona no se respetó. ¿Existirá una persona en el mundo que no sea bella para otra? ¿Existirá una persona en el mundo negada a hacer el bien? Un libro malo siempre tiene algo bueno. Y viceversa. Un libro nos hace mejores. Pero hay que leerlo. ¿Tanto cuesta leer un libro? Gracias.
lunes, 2 de septiembre de 2024
El circo va a empezar y la entrada es gratis.
El presidente del Gobierno, hábil estratega en el manejo de los tiempos acomoda los plazos a sus intereses, como es lógico, y anuncia una convocatoria del congreso federal del PSOE para noviembre. El cónclave federal dará lugar a la activación en cascada de los procesos autonómicos, provinciales y locales, lo que convertirá el 2025 en un ejercicio plagado de procesos internos en la formación socialista. Pedro Sánchez lanza un aviso a navegantes... García-Page, Barbón, Espadas, Tudanca, Lambán, Gallardo... Mientras Europa debate la paridad, una asignatura pendiente de Ursula von der Leyen, Sánchez silente anuncia un congreso federal para poner a cada cual en su sitio. Pero el resto de España es apenas si lo comparamos con la Comunitat Valenciana donde la ministra Morant fue elegida el pasado mes de marzo en un congreso extraordinario. Aunque su figura no suscita debate, lo suscitan los congresos provinciales que se celebrarán a continuación. Intentaré explicarme: Morant se lleva a matar con Bielsa, secretario general de Valencia, de ahí que su entorno ya empieza a allanar el camino a Mayor como sucesor de Bielsa, en otro tiempo uña y carne, pero Morant le prometió la Diputación a Mayor, y si eso huele a traición para unos, para otros es un valor en alza que atraerá a los desencantados de Bielsa a las filas de Morant. Pero hay más, González, afín de Ábalos, aunque pita poco, pitaría lo suficiente si los números están ajustados. (Nadie está a salvo de la Diosa fortuna, ni del humor del César para saber si en noviembre levantará el pulgar hacia arriba o hacia abajo). Gracias.
domingo, 1 de septiembre de 2024
Y la vida dijo sí.
Llegó septiembre y asumo las consecuencias por los inadecuados comportamientos influidos por la pobreza de espíritu (otro terrible descuido de la Magdalena). Mi mente absurda me enreda cuando escribo el día que me gusta vivir al hacerme creer que una realidad afable es posible. Justo ahora que ando como la mayoría de los vencidos atrapado en el arte de lo posible, es cuando tengo que atizar la modorra de los torpes de entendederas a través de la literatura para que no sigan el compás de una marcha patriótica sin bandera y otros versos. Es natural y lógica timidez escribir el día como soneto de una verdad, o el poema de un ensayo vertido con esmero y algún adjetivo en una crónica de vida. La gran fortuna de alguien como yo está en creerse lo que escribe. Me hubiera gustado tener el talento necesario para motivar, incitar a humildes de corazón a entrar en de soslayo, leerme y volver. También militar la amistad con vocación de seguir, con vivencias propias y ajenas, saludando ausencias, justificando olvidos, pero solo me ofrecieron vender elogios. El amor me esquivaba. Confieso que no hace tanto mi vida se iba yendo por decorados oscuros con voces que no callan, el maldito ruido y el dolor de cabeza que levanta. Pero anoche me sentí culpable y le hice una propuesta por escrito a la vida: "Hola, vida, te debo mucho, si eres capaz de olvidar que un día te rechacé, si me absuelves, acepta que comience una nueva relación entre nosotros". Y la vida dijo sí. Gracias.