Y Úrsula von der Leyen dijo sí.

"Virgen de la Amargura, devuélveme la vida, sin ti todo es usura, y noches perdidas". (Joaquín Sabina). Viene pues al caso el dicho popular: "se puede dar sin amar, pero no se puede amar sin dar", de manera qué, hay que echarle cuentas al amor sin condiciones para que no nos sintamos desahuciados. La solidaridad que fue ha de volver pues las cuentas no cuadran, los números no dan y los días pasan dejando preguntas sin respuestas... No sé si me explico, últimamente ando espeso de pensamiento. Perdón por la desesperación. La pandemia me hace demasiado daño. La necedad de los ausentes culpando a los demás para curarse en salud es una metáfora continuada. (Y me cuentan que hay países que no tienen dónde caerse muertos). En lo peor de la pandemia aparece la usura de las farmacéuticas haciendo con las vacunas lo mismo que hicieron con las mascarillas y los respiradores cuando todo lo malo comenzó. ("Londres dobla el pulso a Bruselas en la guerra de las vacunas". Las vacunas todas son de Boris Johnson. Y Úrsula von der Leyen dijo sí. Y la covid-19 siguió matando). Gracias.

¿A la fuerza ahorcan?

Ese amor que amamos por elección del corazón no se improvisa. Aparece por casualidad y bendito amor y santas pascuas. (Disculpen, ¿volveremos a salvar la Semana Santa como salvamos la Navidad con la muerte? ¿Aprendimos, o seguiremos ignorándonos? Cada cual se juega la vida de sus seres queridos. "... y los peores políticos con ganas de fiesta". ¡Canallas!. Como para echarle una foto y colgarla en las redes. Vivo en un qué con miedo y que la suerte me acompañe hasta que me vacunen. Y no soy alcalde. Lo que ven mis ojos es intolerable. Y no lo veo en el telediario). Ese amor es el mejor. Crees que has tenido algo que ver y ni de lejos. Uno aconseja practicar la humildad, y si hablamos de amor, o de política (y dale: dale), además la honradez. La verdad aunque duela, ay. Y aunque la humildad y la honradez no nos hace mejores (ni erradica la corrupción), nos vigila. Apostemos por la vida como los poetas apuestan por el amor. Esas maneras de hacernos daño son alivios con pena y sin consuelo. (Un día gente iracunda fantaseará con amor del corazón y ni sangre en las venas). Gracias.

Un viernes de elegía.

Tropezando por la vida aprendí que no hay que mancar para enseñar ni sangrar para aprender. Aprender no está al alcance de todos, pues cuando uno cree saber el saber se alejó. Se alejó el saber con Eugenio que murió y no resucitó. Aprender de la experiencia, del horror. Dicen que nadie aprende de sus propios horrores. Aprender de la vida... ¿La sociedad es cabrona pero la vida es bella? Dicen de quien libró mil batallas y ninguna ganó... (¿lo cantó? "No". Entonces no perdió). Conviene no fiarse, cerciorarse, examinar por dónde pasó y si retuvo. Quien libró mil batallas y ninguna ganó no perdió, y si vive no murió y retiene. Y tan verdadero como que cada día sale el sol por el Este no defraudará su religión. Las cosas cuando vienen hay que aceptarlas y envejecer con ellas si traen consignas de libre acceso al amor. Por un tiempo hay que esperar y no dejarse llevar. ¿Esperar y volver a vivir la misma queja con llanto? No hay razones ni locuras pertinentes. Quién libró mil batallas y ninguna ganó... ¿Vive o murió? Un muerto boca abajo si respira tarde o temprano alguien dirá que vive y no murió. Gracias.

Mi amor está en ti.

Si aún te echo de menos, dónde mejor que a tu lado. Aunque no me sientas. Siempre estaré cerca de ti con mis recuerdos y mis mejores sueños. Estás más dentro de mí de lo que quisiera; desigual necesidad sentimos. Abrí el corazón y floreciste en mí; abro los ojos y tu mirada sigue clavada en tierra. Hasta que no vuelvas a ser tu misma no serás feliz. Mi amor está en ti.

En los tiempos que corremos poco suma y mucho resta. Otro tiempo hubo que, sin esperar nada a cambio... tenemos lo que merecemos. Solo el amor suma sin restar. Incluyo el bendito amor que ama sin ser amado. En nuestros días no existe nada parecido a la solidaridad: el bien para los que siempre pierden. ¿Será el confinamiento sin fin nuestra condena? Podríamos salir a la calle con lo mejor de nosotros, pero nadie se conoce lo suficiente para saber qué es lo mejor de sí mismo. Y finge: sin ti no soy nada, como el bolero. La experiencia no enseña lo que el corazón celebra. (No rían, es completamente posible). (Tal vez la fuerza sobrenatural te hará libre, pero los delirios optimistas no se cumplen, se cumplen los pesimistas). Gracias.

A veces quiero preguntarte cosas.

La vida sigue. Pase lo que pase y ocurra lo que ocurra, la vida sigue para bien o para mal. Y se asienta sobre el pasado. La cultura. La cultura es pasado y ojalá nunca la dejemos atrás ni la confundamos con algunas tradiciones que aún enraizadas deberían ser cosa del olvido. En nada nos favorece como sociedad mantener ciertas tradiciones y menos confundirlas con la cultura. En la tierra de la luz y el azahar, hay que cambiar la mentalidad festiva por la cultura. La tradición aunque se vista de fallera mayor no es cultura. Bajo el punto de vista del pasado, a veces localizamos una mala experiencia y la proyectamos al presente cargada de pesimismo y no crecemos. Y no crecer es retroceder, y si retrocedemos... ¿Qué encierra el silencio? (A veces me cuesta morderme la lengua porque quiero preguntarte cosas... Ayer te vi y me mordí la lengua: Quiero preguntarte cosas). Creo que gente de tu confianza te lleva por camino turbio. Si las cosas te van peor, no digo mal, digo peor, sino Dios nadie te respaldará: Estás sola. Pero eso ya lo sabes. Lástima que no me leas... Pues mucha suerte y bien por ti). Gracias.

A veces piensas... Y aciertas.

En la noche oscura escribo a ciegas, creo que le dicen retórica hueca, o sea, sin saber si es verdad o mentira, por lo que me obliga a hacer caso a lo que ven mis ojos. La misión del literato es atizar la morrada de la sociedad para que no caiga en las pocas ganas y los políticos en el extorsión, el abuso de poder, y etcétera. La corrupción de siempre. A la retórica hueca yo le digo literatura de lavadero municipal. Lo que se oye en el lavadero municipal es más fidedigno que lo que cuenta un político corrupto ante un juez. Yo no soy de mucho cantar la verdad, y aunque sé que no se puede desatar un nudo sin saber cómo está hecho, lo diga Aristóteles o la vecina chismosa, a una navaja de Albacete no hay nudo que se le resista. A los políticos irresponsables que en tiempos de pandemia viven una realidad paralela, les saldría a cuenta limpiar la porquería que tropa incívica deja al pasar. Y si una empresa desinfecta dependencias oficiales, pues una placa en la puerta lo dice, que no se le olvide ponerle fecha, no vaya la gente a pensar que hace meses que no desinfecta. (A veces piensas... Y aciertas). Gracias.

A los políticos y a los pañales.

"A los políticos y a los pañales hay que cambiarlos seguido... Y por las mismas razones". (George Bernard Shaw). No sé yo.

Me pusieron la vacuna contra la covid-19 porque soy consejero de sanidad, yo no quería vacunarme, soy de Ceuta y yo no quería vacunarme, soy médico y no creo en las vacunas, ni siquiera me vacuno contra la gripe, pero si no me vacunaba yo no se vacunaban los nuestros. Y a mí que soy alcalde de un pueblo y a mí que soy alcaldesa de otro pueblo nos pusieron la vacuna contra la covid-19 porque lo propone Albert Rivera que sabe tanto de la covid-19 como de ganar elecciones y perder doctorados. Yo soy el Jemad y me salté los protocolos de vacunación contra la covid-19 porque soy el que más manda en el ejército español y ahora me voy porque no quiero que el ejército español tenga gente tan poco ejemplarizante. (Son políticos pero no corruptos aunque usen las influencias de sus cargos en beneficio propio y en el de los nuestros. Creamos a George: "A los políticos y a los pañales hay que cambiarlos seguido... Y por las mismas razones"). Seguiremos informando. Gracias.

La humildad tardía.

"Si estás preparado y sabes lo que cuesta, no es un riesgo. Tienes que averiguar cómo llegar ahí. Siempre hay una forma de llegar". (Mark Cuban). 

Hoy me obliga a escribir la humildad tardía de una amiga ida. De la justicia se dice que si es tardía no es justicia. Tal vez la humildad tardía de una amiga ida sea la justicia tardía. Y Mark Cuban: siempre hay una forma de llegar si estás preparado y sabes lo que cuesta... Disculpen, quiso decir si no sabes lo que cuesta. Como a veces digo: vete a la escuela o pregunta, no seas estúpido. Con el perdón. Nada ocurre por casualidad. Ni nadie que no esté loco reconoce su locura. Lo sé porque llevo años de amena tertulia con la dama que no me deja ir. Aunque solo ella reconoce mi locura. Y la de ella por mí, ay, pero ese será tema a tratar otro día si viene el asunto al caso. Lástima que ni la pandemia nos abra los ojos y todo sea cuestión de fe.

-¿Y si perseveramos y resistimos? -Nadie nos exige morir por nadie, sino vivir por todos. Y todos son todas. ¿Hasta cuándo el vilipendio y el abuso de poder? Y perder el tren... (Cariño, perdí el tren hoy y mañana, no me esperes levantado). Gracias.

El pueblo, el gobierno del pueblo.

"Los marxistas conjugamos una misma actitud y un mismo lenguaje frente a los problemas esenciales del pueblo". (Salvador Allende). Y yo añado que sufriremos mil crisis económicas y sanitarias, y seremos objeto del desprecio, el abuso de poder y el desmedido nepotismo, y seguiremos aplicando la misma determinación. "Una misma actitud y un mismo lenguaje frente a los problemas esenciales del pueblo". (No se entienden ellos ni los entendemos nosotros). El pueblo, el gobierno del pueblo.

Soy optimista y militante ciudadano. Y de no ser jubilado, un lujo para los tiempos que vivimos; de no ser jubilado y estúpido podría ser mejor y dejar mi huella al pasar. (El orgullo y el rencor, o solamente el orgullo nos separa de trazar un frente ante las penurias y ese dolor de alma tan parecido a la muerte). Acepto que mi noción de las cosas no sea la de quien gobierna y tiene mi apoyo mientras no vuelva a la vanidad de los peores tiempos: "Una misma actitud y un mismo lenguaje frente a los problemas esenciales del pueblo". (Tristemente la humildad tardía no cuenta con un rincón en mi relicario de amor). Gracias.

Cuando pitos flautas...

En un país vencido por la mentira, en casa del pobre, mueren las mejores esperanzas. Nunca y jamás: "Caiga quien caiga".

En tiempos de pandemia el mercado de los viernes está abarrotado en busca de disculpas. Las hay realmente buenas. Hay una que redime la conciencia: está hecha a la medida de los políticos más torpes. Para los más y para los menos, porque si hablamos de políticos, no podemos excluir a ninguno, son los más torpes cada uno por su cuenta y competencias. Y cuanto más alto, si en realidad lo están... ¿Lo que sube baja? Sí, no los imagino logrando sus sueños en bien de la comunidad. Hoy viernes, y de paseo por el mercado, encontré un puesto que vendía mentiras a medida de las necesidades con argumentos innegables. El tendero aseguraba que con sus mentiras se podía llegar al fin del mundo y volver. Cada loco con su tema. Fui a tomar café y a la vuelta estaba el sitio pero no estaba el puesto ni el tendero. ¿Dónde? Pregunté y disculpas ninguna, pero las mentiras con argumentos se las quitaron de la mano. (Está el país cómo para conceder el beneficio de la duda). Gracias.

"Da bienes fortuna que no están escritos: cuando pitos flautas, cuando flautas pitos. ¡Cuán diversas sendas se suelen seguir en el repartir honras y haciendas. A unos da encomiendas, a otros sambenitos!. Cuando pitos flautas...". (Luis de Góngora).

Desde mi jubilación.

"Para mi corazón basta tu pecho, para tu libertad bastan mis alas". (Pablo Neruda). Sucede que me estoy cansando de ti...

Desde mi jubilación (¡ay, qué tiempos aquellos!), hago la colada y etcétera. Antes lo hacía mi esposa, además de trabajar en una empresa con denuedo. Yo nunca hice otra cosa que trabajar. Yo siempre fui una fiera para el trabajo. Trabajo de político jubilado. Lo cierto es que en mi vida di palo al agua. Aunque no fui un político demagogo. ¡Qué cabeza la mía!, arriba olvidé que además de la colada y etcétera, que no es poco, llevo al día una nostalgia. No niego el pasado ni el futuro que vendrá, ni dejaré de leer y aprender y escribir el día que más me gusta y denunciar a los políticos dependientes de lo prescindible y el aplauso fácil con comportamientos que hasta Dios -"No me acordaré más de su pecado". (Jeremías 31:34), se acordaría. 

No reniego de na, pero los desprecios están ahí y son recientes. El coronavirus me tiene acorralado y los políticos no saben na, ni na de na. Los políticos van a lo suyo y a mí morir, si no es por amor... Y ya ni en Teruel se muere por amor. Gracias.

"... y el odio venció al amor".

"Siempre que odio y amor compiten, es el amor el que vence". (Pedro Calderón de la Barca).

Uno ha insistido tanto en que el miedo es el interés que se paga por la deuda contraída con la conciencia que más que uno soy dos en una... O la dama que no me deja ir. El miedo es una deuda que roe el alma e imposibilita hacer frente siquiera a los intereses y se hace preciso visitar al siquiatra y dejar en sus manos la conciencia y con el tiempo ya vamos viendo. Eso sí, antes de visitar al siquiatra se recomienda solicitar al juez una moratoria, concurso de acreedores o... Para qué perder el tiempo: La quiebra y se acabó. Vaya, escribo y me doy cuenta que si se entrega la conciencia al siquiatra, ¿qué moratoria y etcétera? Disculpen, ¿alguien sabe si manda más un siquiatra o un juez ante la covid-19? Andan los dueños de los partidos políticos desenterrando a los muertos para echarles las culpas y saldar sus deudas con la conciencia y no dañar su gestión. Ni el alma, ay. ¿A quién importa la gestión económica y los recursos humanos infrautilizados a puerta cerrada y en riesgo de contagio? (Los políticos siempre en busca del pringoso éxito sin importar los muertos). "... y el odio venció al amor". Gracias.

No somos niños.

"El talento no sirve para saberlo y decirlo todo, sino para saber lo que se ha de decir de lo que se sabe". (M. José de Larra).

El tercer rebrote, el cuarto rebrote o vayan ustedes a saber. Los políticos no saben. Y no importa que los políticos no sepan porque nunca supieron. Importa que la ciencia no sabe. O ni siquiera sabe lo suficiente. Desde el desconocimiento vamos a peor. Y para mayor adversidad, los políticos que gobiernan aseguran que el sentido común es la mejor manera para encarar el porvenir. Empezar el año apelando al sentido común no es malo, es lo contrario, si habláramos de lo de siempre: dejar de fumar, apuntarse al gimnasio y etcétera. Las estupideces de todos los años... ¿Recuerdan? Pero ahora no hablamos de los excesos cometidos en las fiestas navideñas, ahora hablamos de la covid-19 y de vivir o morir. Ahora son palabras mayores y nombramos a Dios (como a Santa Bárbara cuando truena). No digo que en tiempos de paz nombrar a Dios sea malo, malo es nombrarlo en tiempos de guerra. O cuando la ciencia desahucia. Si tuviera una cuenta en facebook hablaría de tomar la pandemia en serio. Responsabilidad. Más higiene y menos fiestas. Y no sacar a pasear a la covid-19 por las calles. Gracias.

Reescribamos la historia.

"Es mejor permanecer callado y parecer tonto que hablar y despejar las dudas definitivamente". (Groucho Marx).

El pasado fue ayer es una licencia que uso cuando creo que no hay esperanza. ¿Hay esperanza? Siempre hay esperanza si hablamos de futuro: el futuro cambia, lo que no cambia es el pasado. O no hay futuro ni pasado porque todo, en tiempos de pandemia, es un presente indeseado. Bah, es nuestro estado de ánimo acusador. Si queremos cambiar las cosas debemos cambiar nuestro estilo de vida: las maneras de obrar, mirar, decir o reescribir la historia... Si se escribió el Nuevo Testamento sin derogar el Viejo que dice lo mismo con palabras nuevas... -¿Se dejan querer las palabras? Las palabras tienen memoria y no se dejan manosear ni menospreciar y menos halagar. -¿Y qué si reescribimos la historia con palabras sinceras para no volver a vivir las peores experiencias? Reescribamos la historia para sentirnos seguros o la realidad acabará con nosotros... ¡Nuestra historia!. Volver al amor y la santa poesía para devolvernos la confianza y la dignidad perdida. Y la salud. Gracias.

Oda sin consuelo.

Porque obligarás a los nuestros que salen a la calle como si la covid-19 no fuera con ellos a quedarse en casa. O no, allá tú.

Alguien que nos conociera podría pensar que, como la gota que al paso del tiempo perfora la roca más dura, quiero herir tu corazón peregrino. Esa no es mi intención, quiero acompañarte, pero eso ya lo sabes, aunque no niego otra intención. En la vida siempre hay algo que nos motiva con doble intención. Mi mente absurda contradice y confunde, pero no es inquisidora: No quiere convertirte al marxismo. A la experiencia si no se le agrega sabiduría crece a lo tonto... Eres joven y no te imagino echándole un pulso al tiempo. Eres joven pero tu voluntad no es la adecuada para hacer camino al andar indetenible, y a la vez demostrar que tus benditas capacidades alumbran necesidades solidarias y conceptos innovadores. Te sigo de cerca y te empeñas en la igualdad y la discriminas: No sé qué necio proceder te motiva sabiendo que en todo caso pierdes, sino tú, tu alma malherida. Tus allegados dan pena y tu llanto fingido ya no cuela. (Hay un mañana y amanecerá algún día). Gracias.

Las peores noticias no cesan.

Orar a tu Dios a estas alturas de la pandemia no es opción. Llegó la hora de la reprensión... "Se te está yendo de la manos".

Por mucho que lo extraordinario se haya vuelto habitual en este país, aún nos queda espacio para la sorpresa. Los políticos festeros no se han enterado que la normalidad es el problema. Los políticos más nostálgicos se aferren a la memoria y a las fotografías de recuerdos imborrables. Con la pandemia comprobamos nuestras torpezas ante situaciones específicas. Si en un descuido perdemos el guion no sabemos improvisar. Somos incapaces de reaccionar a lo de ahora que es peor que lo de antes. La sinrazón nos estimula y ya es nuestro concierto diario. Llevamos demasiado tiempo conviviendo con la covid-19 y desarrollamos una nueva normalidad inclusiva en la que todo vale, incluyo la muerte. Todos somos culpables, pero más los políticos festeros de silencio y mezquindad. Nos mata el coronavirus y nos mata el pecado de omisión. Los políticos festeros son una nueva cepa del coronavirus, la más infecciosa y dañina. Los políticos festeros matan de covid-19 y pobreza. (Ahora que sabes el cronograma de incubación de la covid-19, saca a los nuestros de la calle y mételos 14 días en casa). Gracias.

De salud, bien.

Desde la indignación y el hartazgo. Desde la desesperanza a veces... Perdona, sé que siempre estuviste ahí para lo bueno y lo malo. Es un gran consuelo. Ciertamente estoy convencido que el universo se confabulará contigo y lograrás lo que por derecho le pertenece. Bajo el punto de vista de los derechos humanos, naturalmente, que son menos o son más, según los informes solicitados y recabados por quien irrespeta y atropella y menosprecia desde el abuso de poder a los que siempre pierden. Mañana, si amanece, seguiremos hablando de lo nuestro, la vida y el amor. La familia, y los hijos primero. Gracias.

P.D. De salud, bien.

La covid-19 avanza con furor ciego de muerte.

Cuando un árbol no nos deja ver el bosque tenemos un problema. Un árbol, alexia (lesión del cerebro que nos impide leer), ganas de no querer ver lo que tenemos delante de las narices o no sé. Por cierto, en plan covid-19, el domingo fui al entierro de una mujer y a su marido le oí decir que se arrepentía de no haber compartido con su mujer más que la cama en invierno. "Usaba" a su mujer para calentar la cama en invierno. Y eso fue todo porque la muerta en su féretro y el marido arrepentido se fueron camino del cementerio. Me hubiera gustado saber para qué la "usaba" en verano. Nuestro Creador, Dios, lo puede todo, pero Dios es uno, y además es capaz de comenzar por el final. Los políticos en tiempos de pandemia no leen, no les da la gana, no atienden a razones científicas, y también comienzan por el final. Los políticos comienzan por el final sin echar cuenta de los muertos. Y como el marido arrepentido que "usaba" a su mujer para sus necesidades los políticos "usan" a los votantes para las suyas. Mientras, la covid-19 avanza con furor ciego de muerte. (Quédate en casa y no molestes). Gracias.

Solo Dios vivo se revela Eterno.

"La Comunidad Valenciana cierra 2020 con 9.930 mujeres víctimas de maltrato de género (85 en riesgo alto) dadas de alta en el sistema VioGén que aglutina a todas las mujeres que tienen algún tipo de protección policial derivada de un proceso judicial abierto por violencia de género. 38 % de ellas (3.769 casos) son mujeres con hijos menores de edad a su cargo, lo que da una idea de la dimensión familiar que supone el terrorismo machista". (Levante). La violencia machista no da tregua.

Ayer, el diario Levante se olvidó que, además de los miles y los porcientos y los procesos judiciales y policiales, hay más: 5 Mujeres Eternas han sido dadas de baja en el sistema VioGén en 2020 porque fueron asesinadas por asesinos conocidos...

"Y si no das más, solo encuentra lo que hay en tus manos, piensa que dar amor nunca es en vano. Sigue adelante sin mirar atrás". (Pablo Neruda). La mujer quiere seguir adelante por sus hijos y por ella misma y solo pide vivir. La mujer quiere vivir y ese es un problema aún por resolver en este país machista, mezquino y vil donde solo Dios vivo se revela Eterno. Gracias.

La soberbia y el orgullo del ego.

"La soberbia nunca baja de donde sube, pero siempre cae de donde subió". (Francisco de Quevedo). ... y el orgullo del ego.

De cuando en vez la vida nos empuja al abismo. Los desahuciados de la vida cada día son más y miran al cielo como única esperanza. ¿Qué le queda a quién pierde la esperanza? Quien no se consuela es porque no quiere. Y sin embargo, algunos se auto excluyen de la vida. Como los cuatro millones de españoles que sufren pobreza energética... Insisto: ¿Qué le queda a quién pierde la esperanza? Que el dolor no nos sea indiferente. En particular el que imponen los que cobran por encender la luz en la oscuridad de los que siempre pierden. No se trata de ganar, ni volver al amor que siempre queda. No se trata de nada que no sea burlar la realidad de los que siempre pierden y, como un único Dios, devolverlos a la vida sin esperar nada a cambio, pues ya cobraron. (¿A qué vinieron los buenos deseos para el año que comienza? De todos los cinismos el peor. La soberbia y el orgullo del ego alcanzarán su objetivo camino del cementerio... Y nadie los acompañará más allá). Gracias.

¿Qué es lo que quiere la mujer?

"He aquí la gran incógnita que no he podido resolver, a pesar de mis treinta años de investigación sobre el alma femenina: ¿Qué es lo que quiere la mujer? (Sigmund Freud).

Hoy te vi pasar y tus mejillas se tornaron rojas y en tu involuntaria sinceridad aparecieron tus miedos. Creo que debo tomar precauciones si te vuelvo a ver. Corren malos tiempos, aunque ya corrían antes de la pandemia. Hoy me emocioné al verte. ¡Qué emoción!. Hoy me di cuenta que eres fruto de mi mente absurda. Hoy me di cuenta que eres una paranoia. Hoy me di cuenta que ni siquiera me cuento mis emociones. Y qué importa si el alma duele, si llueven lágrimas del cielo. Qué importa a nadie si solo yo sé lo triste de morir que te sientes y ni siquiera me lo cuento. Nadie sabe qué sientes ni por qué vives en el desespero. Se olvidaron de ti y también de mí. De ti tus dueños y de mí yo. (Donde la injusticia dormita despierta la perfidia). Llamas demasiado la atención y es malo. Como malo es que la gente dependa de tu misericordia. Y vuelvo a emocionarme. ¡Qué emoción!. (La incertidumbre que provoca la pandemia no excusa, ni el amor excusa, solo la acción excusa). Gracias.

Cuando la nieve es más fría que la muerte.

Cuando llueve en el pueblo de Patricia en España nieva. Y en Les Seniaes luce el sol. De joven tuve una novia: Filomena se llamaba, qué mujer, de aquella, ya no me inspiraba confianza. La nieve es encantadora si la vemos desde la ventana. Y más encantadora sería si no la acompañara el peligro en la carretera y los aludes y la tarifa eléctrica. Para los políticos con alma festera es una obsesión sin descanso ¿? Y para los que siempre pierden la muerte. Ayer en el diario Actualidad Valenciana: "Solo dos policías atienden a los sin techo en Valencia, y en horario de mañana. En la ciudad existen 145 asentamientos de personas que viven sin hogar, y cerca de 800 personas las que duermen cada noche en las calles de la ciudad". Yo voté al PSOE y lo volveré a votar si aparece la "O", de lo contrario, el voto es secreto. El PSE no me representa. No hay bancos en los parques para tanto sin techo... (Hay dos pasos que los políticos sin conciencia en tiempos de pandemia no se atreven a dar: atenerse a las medidas sanitarias contra la covid-19 y solucionar las necesidades de los que siempre pierden). Gracias.

Javier del Pino ¿y yo?

Javier del Pino, en su programa "A vivir que son dos días" de la Cadena Ser, ayer sábado confirmó que el paranoico de los cuernos con piel de oso que asaltó el Capitolio de Washington es asturiano. Hay que joderse. ¿Se lo pueden creer? Javier del Pino es tan valenciano como yo: él nació en Madrid y yo en Asturias y nos enamoró Valencia. Los dos nacimos en tierra extraña. Y si les digo que en la pared de la escuela del pueblo de Patricia luce la "estelada blava" (bandera independentista catalana) desde hace años... Sí, como que hoy es domingo. Los valencianos son independentistas catalanes y un asturiano asalta un parlamento extranjero. Como el rey francés Jaime I de Valencia. Una de las maneras de ser feliz, si no te encanta hablar mal de los demás (y sufrir), es vivir donde te gusta y no darle certeza al proverbio: "Donde fueres, haz lo que vieres". Probe Joe Biden y probe Javier del Pino ¿y yo? Ojalá que cuando la covid-19 sea historia volvamos a una normalidad donde quepan todos y nadie sobre. (Al menos, hasta que las tropas asturianas desembarquen en el puerto de Valencia). Gracias.

Que no falte la palabra.

El pragmatismo ha acabado con la teoría del idealismo y son muchas las que ven la santa poesía como un algo ininteligible.

Me duele tu ausencia como si no hubiera mañana. Me cuentan tus allegadas que no te van bien las cosas... Vuelve al amor. Los hechos están ahí y son irrefutables. Vuelve al amor y próspero año 2021. Te estás haciendo daño. Hay un abismo entre tu silencio y tus actos. No esperes que una lluvia de afectos se diluya en un mar... Vuelve al amor o acabarás haciéndote el harakiri. Yo, después de haber vivido más de una vida aprendí... Duele tu ausencia. Soy el mismo de ayer, me conoces. ¿O no? A pesar de los prejuicios y las peores opiniones, negamos que podemos ser mejores personas sin dejar de ser nosotros mismos. ¿Qué tan grande fue el daño que nos hicimos que no recuerdo? Es tiempo de amar al amor que siempre queda. Y hablar. La primera víctima del victimario es la palabra. No seas mi anhelo, un sueño imposible. Que no falte la palabra. No te hagas daño. Vuelve al amor o se teñirá de oscuridad tu recuerdo... (No es ironía que te desee próspero año 2021). Gracias.

No me llames Dolores.

Primero los derechos fundamentales: sanidad, dependencia, educación, trabajo y etcétera. Luego los políticos y el Ibex 35.

Un viernes de mercado la disculpa tiene que ver con la vida indiferente que vivimos. Cumplimos expectativas ajenas. Nunca fuimos así. Son expectativas ajenas y no sabemos quiénes son sus dueños ni cuáles sus intereses. Algunos los acabamos de conocer y nos entregamos a ellos con ánimo escapista. Lo bueno por conocer es peor, son caminantes y como vinieron se van. Como si nos fuera la vida en ello no torcemos el brazo. Entonces nos damos cuenta que estamos solos, muy solos. Huimos del amor contrariado, del amor que siempre queda. Huimos sin importar que vinimos a este mundo a amar y nunca odiar. El problema somos nosotros mismos y son muchas las sombras, además de la pandemia que pone en peligro la vida. Si hablara de política y no de amor, culparía al fascismo que desgraciadamente está clavado en el alma de los que siempre pierden. Los amigos empresarios de Rajoy y sus alumnos más aventajados se han apropiado de los derechos laborales y el PSE sin la "O" es la condena y el partido del "irrepetible" la liberación. (Ojalá y que el CIS y yo nos equivoquemos). Gracias.

Lenguaje triste de palabras.

"Si amas al dinero a lo sumo llegarás a un banco, pero si amas a la vida, seguramente llegarás a Dios". (Facundo Cabral).

Como los políticos que viven sometidos a su dueño, a sus fans, a las apariencias y a sus negocios. Y dale con los políticos. Recuerdo aquellos encendidos mítines apelando a la vecindad, la trasparencia y al buen gobierno. Recuerdo, pues, aquello que nunca tuvimos y echo la mirada con tristeza a lo que tenemos: irresponsables, festeros y malos burócratas que ejercen conscientes de trasmisores de los peores comportamientos, quizá nunca vistos, o solo recordados por los vivos más viejos. 

Reconozco que la covid-19 que llegó sin avisar me está haciendo realmente daño. Cuando desfallezco en mí con el día que escribo acabo recordando que me salva el amor y la santa poesía. O una amiga ida. Hoy me salva una vida por vivir entre la salud y la enfermedad. (Cierra la puerta al coronavirus que me llevas la vida... Olvida rencores y ya los retomarás cuando la vacuna gane la guerra. Tú, hazme caso, pero no esperes que tu cuerpo deje de temblar mientras tu alma sangre). Gracias.

Hada niña.

Se cuenta que en el Pueblo de Patricia hace años nació en la Noche de Reyes, fruto del amor, una niña. Su madre no daba crédito: su hija había nacido la noche soñada por la ilusión. La niña tenía hábitos extraordinarios: era aficionada a la danza y pasaba el día jugando entre risas y alegrías. Su madre consultó libros de ciencia, también a doctores que habían jurado a Hipócrates, a pesar de que Hipócrates negaba los sueños y la creatividad. Ni libros ni doctores, no encontró explicación. Sin saber ni tan siquiera el qué de tan enigmática conducta, su madre siguió indagando hasta que un día alguien le habló de un hombre sabio. "Se llama Eugenio, consúltale". Y le consultó: "Eugenio, ¿sabrías explicar el hecho de que mi hija, nacida la Noche de Reyes, pase el día danzando y jugando entre risas y alegrías? No sé qué creer". "¿Cómo se explica un sueño? Te contaré una historia que ocurrió hace muchos años. En aquel entonces, Les Seniaes fueron visitadas por un número infinito de Hadas en busca de una niña elegida por el azahar para suceder los poderes mágicos de la ilusión. La niña no apareció". Entonces la alcaldesa del Pueblo de Patricia ordenó un bando: "Hasta que no aparezca la niña destinada a suceder el poder de la ilusión queda prohibida la entrada a Les Seniaes". Corrió el tiempo la alcaldesa se olvidó de Les Seniaes y qué triste.

Hay personas que niegan la existencia de las Hadas, otras afirman que sus poderes mágicos les permiten perdurar más allá de los tiempos. Hada niña, sé quién eres y que vives en el corazón de quien cree en ti. Hada niña, yo creo en ti y te quiero.

En de soslayo. Miércoles, 6 de enero de 2021 de un cumpleaños feliz.

Aclaración.

Sirva como aclaración a la indigencia política de las siete de la mañana: "Oremos, pues", la sentencia de Platón. "Uno de los castigos por rehusarte a participar en política, es que terminarás siendo gobernado por hombres inferiores a ti". A Platón, sin ser poeta, le compro la sentencia. Lo dejo en sus manos. Mañana vuelvo, y, si la María quiere, desde Les Seniaes. Gracias.

Oremos, pues.

Si no existiera el bien no existiría el mal. En tiempos de pandemia que nadie tome la salud a la ligera, la salud de otros. Está la vida en juego. Los políticos no son olvidadizos, son descuidados con sus tareas y no les entra en la cabeza que se juegan mucho, tanto como la salud de los demás. Y con la salud no se juega. No se juega con nada, con nada si no les pertenece y con la salud menos. Ciertamente algunos no cumplen con sus obligaciones y solo falta que la covid-19 encuentre una puerta cerrada y pase por debajo. La puerta cerrada tiene rendijas. La puerta cerrada no cumple los protocolos sanitarios contra el coronavirus y es cuestión de tiempo. Les pediría a los Reyes Magos que acabase con los políticos demagogos de promesas incumplidas, aunque tal vez no sea cosa de los Reyes Magos y lo sea de la oposición ausente o de los votantes. Acabar con los políticos que les importa nada la salud, los trabajadores a su cargo y el erario, es asunto de todos, oposición y votantes. Se sabe que la oposición ausente no, y los votantes este año tampoco. (Qué poco aún has sufrido. Oremos, pues). Gracias.

Celebrando la muerte.

Celebramos que Dios tuvo un hijo y obligamos al Viejito Pascuero a visitar a los enfermos en los hospitales. Como siempre. Pero siempre no es ahora. La vida de ahora es otra. La vida de ahora está por descubrir. Y no tenemos nada para celebrar y sí mucho para lamentar. Vendrá la muerte y estaremos allí y nos mirará a los ojos. Un hijo llorando a un padre, llorando, sea hijo, hija, madre o etcétera. No tenemos nada para celebrar. Acompañémosles en su dolor desde casa y en silencio. A veces pienso y llego a la conclusión de que nos tenemos que morir y no resucitar jamás. Volvamos al amor de los nuestros. Somos culpables de lo malo y cómplices de lo peor. A mí me salva tu risa que sigue siendo mi alegría. ¿Y a ti? Te dejas acompañar de la muerte y no haces nada para evitarlo. No hay risas ni alegrías en tu vida. Eres como la covid-19 y la vacuna. Lo malo y lo bueno. (Y lo peor que está por llegar). ¿Por qué le rezas a tu Dios? "Nadie puede hacer que algo suceda a menos que el Señor así lo ordene". (Lamentaciones 3:37). Celebrar la vida y no la muerte depende de nosotros. (Y algunos de ti). Gracias.

Juicio crítico.

Hoy pueden esperar consejo. Los cambios están aquí y han venido para quedarse: "Un final puede ser un gran comienzo". Ocurre que ya estaban, pero no quisimos verlos o no nos interesaron. Un gran comienzo tendrá que venir de la mano de la realidad que no admite demoras. Hoy, un domingo de ir a misa y cantar siempre la verdad, quiero decir que las plataformas virtuales de televisión son catatónicas. El consumo de "todo" desde el sofá, incluyo las redes sociales que más parecen el radio patio de la colindancia. Las redes sociales practican el anonimato e insultan la inteligencia como los políticos desde el Parlamento. Cine, teatro, música, biblio, la agradable conversación y un café. Estamos acabando con la CULTURA (siempre en mayúsculas). La CULTURA ya enfermó y espera habitación en la UCI de un hospital. Igual que ayer mala cosa, pero esta mala cosa, sé qué mala cosa es. También lo sabe y mejor lo explica, Fito Páez: "Algún día lo vas a entender, es que cuando nos echamos a correr hay mil maneras de seguir pero ninguna de volver". La CULTURA (siempre en mayúsculas). Gracias.

El año de los que esperan.

¿Y qué si pedimos a la Unesco que declare el beso y el abrazo Patrimonio de la Humanidad? Y volvemos a la santa poesía.

El comportamiento del humano ser debe estar en perfecta armonía con la palabra. Y no dejar en evidencia al amor. Vivimos escenarios donde lo seguro es el cambio. "Un final puede ser un gran comienzo". Lo leí en un libro. Es bueno leer libros, tal vez no tengamos otra oportunidad en la vida. Y no digan que no les gusta. Pero si no les gusta, es su problema como lector. Si un libro no gusta, nada gusta, y ni la duda asusta. Como el amor cuando no es locura, locura de amor, que no es amor ni es locura. Es otra cosa. Mala cosa, pero no sé qué mala cosa será. Así que no esperen consejo. De viejo sé menos y menos reconozco a mi colindancia. Lo echaría todo a perder, pero si lo pierdo nada me quedaría y es lo que tengo. El respeto debe ser mutuo y de arriba abajo. Humillar desde arriba viniendo de abajo no tiene nombre. Y uno se muerde la lengua. La gente que no lee libros no vive o vive a medias... Los puntos suspensivos son la espera de la que solo espera que 2021 traiga de nuevo Les Falles. Otros solo esperan llegar a fin de mes. (Sobra tiempo para esperar si son otros los que esperan). Gracias.

Atrévanse nomás.

"El sabio amargo dijo: Vanidad de vanidades, todo es negra vanidad; y oyó otra voz que clamaba, alma de soledades: solo eres tú, luz que fulges en el corazón, verdad". (Antonio Machado).

Ahora que sabemos que a la fuerza ahorcan, podríamos hacer las cosas que, sin esfuerzo, logramos que fueran un dolor de muelas en 2020 por si el 2021 que hoy comienza nos complace con su humildad. Atrévanse nomás. Quiero escribir el primer día feliz para 2021 y no hallo palabras que lleven una pizca de esperanza a la negra vanidad. Son fechas para la reflexión y el debate, y a mí nunca se me dio bien el arte de conversar. Como los irresponsables no dejen de serlo, como la vacuna no sea cosa seria y el amor vuelva y desencadene afectos permanentes 2021 será imposible, o cuanto menos más complicado que 2020, y ya es decir. Si no sabemos a dónde vamos, difícil será llegar a algún lugar. Hablo por mí que no encontré lo que busqué desde el día que todo comenzó en Les Seniaes. Si no la familia, y créanme que lo intenté, nada de res. El pueblo de Patricia y yo no nos llevamos bien. Eugenio diría que intentara ganármelo pero yo que soy hijo de la noche desvelada no me reconcilio con Morfeo porque no quiere. 2021 será el año de darlo todo. A 2021 le pido trabajo y salud para todos. Gracias.