"Si queremos un mundo de paz y de justicia hay que poner decididamente la inteligencia al servicio del amor". Antoine de Saint-Exupéry.
Un Ángel cruzó un mar inmenso (andando, no me cabe la menor duda) para traernos cariños a toda la familia. Y pienso que no estoy solo: Es lo primero que me viene a la cabeza. Luego, que allende los mares la poesía es privilegio de quien sabe que sin amor nada merece la pena. Un ser humano excepcional sabe de mí, Un Ángel, es mi mayor orgullo. Corría el 2005 y un Ángel se acercó a mí. Yo de aquella ya tenía un Ángel González poeta, pero dos ¿? Hoy, me siento inmensamente feliz porque un Ángel, Roxana Herrero, aún se acuerda de mí y me dice ni más ni menos que me quiere, y a toda mi familia. Mis buenos deseos para ti, para tu nueva vida, para tu gran amor entre sábanas blancas de algodón egipcio, para toda tu familia, sino igual, que de humano ser no paso, serán parecidos. Hasta donde alcancen. Permanecer y transcurrir para honrar al amor y a la santa poesía. Que la vida os sea favorable. Que te vaya bonito, Rox. Te quiero.
Qué perdure la amistad es gran cosa, porque uno no camina por la vida pensando que las personas malas, al contrario. Es común que tengamos simpatía por alguien que nos demuestra con un gesto o con una palabra, su costado bueno. De ahí, pasan muchas cosas, a veces, con el tiempo descubrimos ese otro lado lleno de sentimientos contrariados que se imponen y que nos obliga a desistir en la continuidad de la relación. Pero resulta, que si hilamos fino, sabemos quienes y por qué nos acompañarán siempre. "Siempre" es un vocablo para arriesgados, para sensibles, para personas de amor. Resumiendo: Yo vi tu corazón, luego vi el corazón de tu familia y decidí que era un lugar seguro donde compartir mis sentimientos. Te quiero.
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