viernes, 4 de noviembre de 2011

Hoy, un día triste

Hoy, un día triste por un motivo que no viene al caso. Pero qué: Por qué no va a venir al caso si hablo de vida. Y si hablo de vida, hablo de muerte. (Algún día todos nos tendremos que morir).

Tie­ne be­sos ar­dien­tes para regalar: Ca­ri­cias sedientas de amor. Son la­bios instruidos en el amor amar. Tiene néc­tar di­vino (creyente en su dios). Pero no tiene una vida segura. Ayer una biopsia le dijo que ya veremos... Entonces, otro descuido, otra pregunta para la historia sin respuesta. Otro mal chiste sin autor. Corren malos tiempos para la vida y el amor. Todo esto viene al caso porque sí. Forma parte de una sinfonía, son las notas que com­po­nen, junto a su esposo, sus hijos y sus padres la familia. Distintos co­ra­zones unidos; es un concier­to de amor. Repito: "La familia". Ella, una dul­ce son­ri­sa que ale­gra y ador­na su hogar. Ella, la emoción, la fuen­te que todo ins­pi­ra. Un con­cier­to de amor distinto cada día. Una madre (otra amiga). Mis afec­tos de ad­mi­ra­ción acompañados de una oración a su dios verdadero. No perdamos la fe. (Cier­ta­men­te hay que es­tar vi­vo pa­ra que sucedan cosas como esta).

No hay comentarios:

Publicar un comentario