lunes, 3 de noviembre de 2014

¿Quién dijo que ya nada será igual?

Ejerció de madre y esposa a la vez,
eso no es poco.
Luego sufrió una vida de mejor olvidar
y le dieron un pase sin preguntas para visitar hospitales y centros de salud.

Me cuentan que experimentaron con ella pócimas
para enfrentar su enfermedad a la sanación
utilizando males para bienes.
Mientras, sin darse cuenta,
camuflaba su prosa y su poesía,
y sin querer se fue olvidando de vivir.

Una mujer en busca de la verdad le cantó a la vida pero su afonía no le permitió sino cantar al desamor. Con decir que un verso libre que pasaba por allí se sorpendió de tal manera que quiso redescubrir el día con ella y premiar su valía de mujer heróica.

7 comentarios:

  1. ¿Un verso libre? ¡Guau me emociona como si fuera yo!

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  2. Precisamente termino de ver el corto NUNCA ES DOMINGO en el blog "Calados hasta los versos". Besicos.

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  3. Las afonías son buenas para los versos....
    Saludos.

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  4. Y el orujo de Potes para las afonías... Muchas gracias.

    Salud.

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  5. Está bien premiar el coraje de vivir.

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  6. Es justo. Muchas gracias. beso.

    Salud.

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