El señor Carlos Slim, unas de las mayores fortunas del mundo, propone para su estudio que la jornada laboral se reduzca a 33 horas semanales dividida en tres jornadas. Quedaría organizado de la siguiente manera: cuatro días libres de cada siete para dedicar a la familia, ocio, sofá, instruirse en nuevas habilidades o pasear por un mar en yate.
El asunto está sin madurar, no está todo claro, pero lo que han recogido los medios es más o menos eso: trabajar tres días a la semana y cobrar siete. Yo lo tendré que pensar seriamente, a mí dedicar tanto tiempo a la vida contemplativa no me acaba de convencer. Lo digo como lo siento.
A ese estúpido -perdona mi vocabulario- con tanto dinero lo único que se le ocurre es jodernos la vida a los demas como el no sabe lo que es la necesidad. ¡El diablo cargue con el! -perdona de nuevo-. Acostumbrados a trabajar bajo el miserable sueldo de quienes son explotados, el quedarse tanto tiempo en casa viendo como se nos va la vida ante la desesperación de no alcanzar el dinero para nada, la tasa de homicidios crecería irremediablemente pero ese imbécil -disculpa- no sabe mas que pisar at los demas sin que le importe mas nada. Igualito que hacen los hombres de negocios, así mero.
ResponderEliminarLo siento.
ResponderEliminarNo lo sientas, no tienes la culpa que tipos como ellos existan en este mundo.
ResponderEliminarYa, pero (te) hacen daño. Beso.
ResponderEliminarSalud.