Es un clamor,
es la confusión:
Es la fe.
Fe en que el silencio nos devuelva parte de lo que le hemos dado,
Fe en que la esperanza,
que tiene la potestad de perdonar nos salve.
Aunque el amor camine por los vericuetos del olvido; aunque a veces se estanque en recodos amenazantes; aunque se le llame de otra manera ante diferentes circunstancias que se vea sometido; aunque se disipe entre la rutina; aunque vuele por el espacio perdido; aunque no se vislumbre a corta distancia y en apariencia resulte inalcanzable, nunca dejara de latir, de expresar en cada nota su existencia, sus sueños, sus deseos, sus ilusiones, sus fantasías y sus ansias de vivir. El amor siempre estará presente como un estigma sobrenatural, imborrable, persistiendo sin importar el tiempo por infinito. "En los ojos del joven arde la llama; en los del viejo brilla la luz". Víctor Hugo.
Francamente magnífico.
ResponderEliminarSaludos
Mark de Zabaleta
Gracias.
ResponderEliminarSalud.