"El cuerpo expresa lo que la mente se calla"
"El que no llega a 120 años es porque se lo ha bebido o se lo ha fumado", sostiene el naturopata, iridólogo y acupuntor.
Sigue reivindicando, como hacía en televisión, la "botica de la abuela" recogida, ampliada y actualizada en "Los remedios de la sabiduría popular" (Ediciones B). Esta tarde ofrece una charla-taller en el Herbolario Navarro de Valencia.
Confieso: he desayunado sólo un café con leche calentado en microondas y he tomado un fuerte analgésico. Lo del microondas, fatal, pero cuando hay dolor lo primero es quitar el sufrimiento, tomando drogas si es necesario. El sufrimiento es lo último. Aquí hemos venido para amar y ser amados. Hay que llevar una vida sana para no llegar al dolor y no tener que medicarse.
-¿Estamos enfermos porque vivimos en una sociedad enferma?
Sí, estamos todos de los nervios, ansiedad, estrés, rabia contenida, la situación económica... Son las emociones las que enferman al ser humano. Todo aquello que no expresamos al exterior queda impreso en el interior, y tarde o temprano el cuerpo te lo devolverá con dolor. El cuerpo expresa lo que la mente se calla.
-Dice usted que podemos vivir 120 años, ¿nos empeñanos en acortarlos o no nos lo permite la Seguridad Social?
Se podría vivir 120 años, el que no llega es porque se lo ha fumado, se lo ha bebido o se lo ha comido. Los japoneses son los que mayor índice de vida tienen, allí pasar de cien años es muy normal.
-¿Por qué?
La alimentación es muy importante, y la forma de tomarse la vida. Y que no toman leche. No tenemos el sistema digestivo preparado para asimilar la leche.
-¿Comemos demasiado?
Sí, y mal distribuido y mal combinado. Todos, yo también, pero llevo una alimentación saludable. Tendríamos que tomar como mínimo un 50 % de verduras y hortalizas, un 30-40 % de legumbres, de grano, y el resto, 10-15 % de alimentos de origen animal. Esta sería la proporción ideal antropológicamente para una persona que con nuestra dentadura y nuestro intestino. Hay alimentos básicos, las aceitunas, las nueces, la semilla de sésamo, el aceite de oliva, el arroz integral, el atún rojo, los pescados de tamaño pequeño, la sardina, el jurel y el verdel.
-¿Tenemos la farmacia en la cocina?
Sí. Con todos los elementos que tenemos en la despensa podemos hacer muchas cosas. Por ejemplo, si no puedo pegar ojo un sencillo remedio es pelar una naranja, hervir la piel y beberlo.
-Algunos de sus remedios serán buenos para la salud, pero no para la vida social, como consumir tanto ajo y no digamos ya la orina en la cabeza contra la caspa.
Es verdad. Pero si comes ajo y masticas perejil neutraliza el olor.
-¿También dormimos mal?
Sí, para que el sueño sea reparador hay que bajar tres, cuatro ciclos y con el ritmo de vida que llevamos no le damos permiso al cerebro. También porque tenemos la habitación llena de campos electromagnéticos y la orientación debe ser al norte.
-¿Y dejamos de soñar?
No, si dejáramos de soñar moriríamos.
Susana Golf para Levante-EMV.
Copio integra esta entrevista: "si dejamos de soñar morimos, pero sí podemos dejar ciertos malos hábitos, y alimentarnos mejor". Merece la pena, aunque nada más sea para vivir 120 años contigo, amor. (El cuerpo expresa lo que la mente se calla).
"El que no llega a 120 años es porque se lo ha bebido o se lo ha fumado", sostiene el naturopata, iridólogo y acupuntor.
Sigue reivindicando, como hacía en televisión, la "botica de la abuela" recogida, ampliada y actualizada en "Los remedios de la sabiduría popular" (Ediciones B). Esta tarde ofrece una charla-taller en el Herbolario Navarro de Valencia.
Confieso: he desayunado sólo un café con leche calentado en microondas y he tomado un fuerte analgésico. Lo del microondas, fatal, pero cuando hay dolor lo primero es quitar el sufrimiento, tomando drogas si es necesario. El sufrimiento es lo último. Aquí hemos venido para amar y ser amados. Hay que llevar una vida sana para no llegar al dolor y no tener que medicarse.
-¿Estamos enfermos porque vivimos en una sociedad enferma?
Sí, estamos todos de los nervios, ansiedad, estrés, rabia contenida, la situación económica... Son las emociones las que enferman al ser humano. Todo aquello que no expresamos al exterior queda impreso en el interior, y tarde o temprano el cuerpo te lo devolverá con dolor. El cuerpo expresa lo que la mente se calla.
-Dice usted que podemos vivir 120 años, ¿nos empeñanos en acortarlos o no nos lo permite la Seguridad Social?
Se podría vivir 120 años, el que no llega es porque se lo ha fumado, se lo ha bebido o se lo ha comido. Los japoneses son los que mayor índice de vida tienen, allí pasar de cien años es muy normal.
-¿Por qué?
La alimentación es muy importante, y la forma de tomarse la vida. Y que no toman leche. No tenemos el sistema digestivo preparado para asimilar la leche.
-¿Comemos demasiado?
Sí, y mal distribuido y mal combinado. Todos, yo también, pero llevo una alimentación saludable. Tendríamos que tomar como mínimo un 50 % de verduras y hortalizas, un 30-40 % de legumbres, de grano, y el resto, 10-15 % de alimentos de origen animal. Esta sería la proporción ideal antropológicamente para una persona que con nuestra dentadura y nuestro intestino. Hay alimentos básicos, las aceitunas, las nueces, la semilla de sésamo, el aceite de oliva, el arroz integral, el atún rojo, los pescados de tamaño pequeño, la sardina, el jurel y el verdel.
-¿Tenemos la farmacia en la cocina?
Sí. Con todos los elementos que tenemos en la despensa podemos hacer muchas cosas. Por ejemplo, si no puedo pegar ojo un sencillo remedio es pelar una naranja, hervir la piel y beberlo.
-Algunos de sus remedios serán buenos para la salud, pero no para la vida social, como consumir tanto ajo y no digamos ya la orina en la cabeza contra la caspa.
Es verdad. Pero si comes ajo y masticas perejil neutraliza el olor.
-¿También dormimos mal?
Sí, para que el sueño sea reparador hay que bajar tres, cuatro ciclos y con el ritmo de vida que llevamos no le damos permiso al cerebro. También porque tenemos la habitación llena de campos electromagnéticos y la orientación debe ser al norte.
-¿Y dejamos de soñar?
No, si dejáramos de soñar moriríamos.
Susana Golf para Levante-EMV.
Copio integra esta entrevista: "si dejamos de soñar morimos, pero sí podemos dejar ciertos malos hábitos, y alimentarnos mejor". Merece la pena, aunque nada más sea para vivir 120 años contigo, amor. (El cuerpo expresa lo que la mente se calla).
¿En serio querrías vivir 120 años? ¡Jesucristo vencedor, aplaca tu ira y tu rigor!
ResponderEliminarYo no me los he bebido (No bebo) ni fumado (Me duele la cabeza si fumo) ni comido ( bueno si) pero igual durante muchos años llevé una vida sana e igual he estado medicada desde mi primera infancia por eso digo da igual coma sano o no si de todas maneras ando arrastrando la cobija con una mala salud.
¨Aunque nada más sea para vivir 120 años contigo amor¨ suena muy romántico de soslayo.
¿En serio comes todas esas verduras y tal? Yo cuando como verde, me siento vaca jaja.
Bueno ya, muchas risas para ser tan tempano de este lado del charco me voy a tomar un café a tu salud.
Yo también querría vivir así sin peros que me frenen.
ResponderEliminarVivir porque me gusta, porque puedo ser feliz tan sólo con unos versos o una sonrisa que ilumine mi mañana. Ser feliz por tener familia, amigos, salud.
Vivir para adorar a una pequeña que me ha robado el alma.
Vivir sin peros.