La jodida caja

Un amigo me dice que mientras la caja no cuedre no saldremos de la crisis. "Hay que cuadrar la caja", me dice una y otra vez. Pesado mi amigo. Aunque pudiera tener razón, sino toda en parte. No podemos gastar más de lo que ingresamos. Sin embargo, los pensionistas y jubilados, los discapacitados y dependientes, los niños en la escuela, los mayores en la universidad... no sé, creo que estos colectivos van a tener difícil cuadrar la jodida caja... Gastan y no ingresan. Entonces, ¿de dónde sacamos dinero para pagar a estos ciudadanos que restan y no suman? Supongo que quien suma tendrá que pagar por ellos optimizando los recursos humanos, gestionando mejor los dineros del erario. Trabajar más eficiente y exportar. Tratar bien al turista para que vuelva (sé lo que digo). Y puesto que a los de abajo ya nos han quitado hasta las ganas de vivir, ese diez por ciento que dice la señora del FMI que se lo quiten a los de arriba... Empezando por Rajoy y acabando por el último cargo público, sin olvidarnos los asesores como el marido de la rubio manchego. Qué buen puesto ese de asesor de un cargo público... no tienen escala ni tarifa. Es que por no tener ni tienen horario laboral, ni sabemos cuantos son... Nunca salen en la foto. También seria genial que les rebajaran el sueldo a los presidentes de las empresa publicas. Y de los bancos donde el Estado tiene participaciones... Me gustaría darle a mi amigo nombres de banqueros que después de hundir sus cajas de ahorros se fueron para casa de rositas con cientos de millones de Euros. Tal vez algún día sepamos lo que pasó en realidad. En este país nadie debiera ganar más que el presidente del gobierno... Y adelgazar el Congreso, y el Senado, y las Diputaciones que fueran ya historia, y en ese plan hasta acabar con lo inútil. Sin olvidar los ladrones de guante blanco que están en manos de la justicia y los que no pero estarán. Y las grandes empresas que defraudan el ochenta por ciento al fisco. Y todos los que se me escapan pero están en esos paraísos fiscales con sus dineros.
 

Y ya puestos, nombrar a un Presidente del Estado que nos cueste lo que vale. Un Presidente elegido por el pueblo. Los ocho millones de euros que nos cuesta La Casa Real a todos los españoles me parece un precio abusivo. Por el Estado de Bienestar y la convivencia digna. Por la democracia. Porque a mi amigo le salgan las cuentas y cuadre la jodida caja. Aunque nada más sea por eso.