martes, 13 de agosto de 2013

¡Qué tristeza la mía!

Cuando una amiga dale todos los días convencida de que no nació para este mundo. Y que si nació solo lo hizo para parir tristezas... ¡Qué tristeza la mía!.
  
Parece que fue ayer un día (otro) triste para ella. Al parecer tenía que visitar a un médico especialista y tal vez las noticias no fueron de su agrado... Los médicos a veces son portadores de malas noticias... pero no siempre... Y si lo son no son culpables. Nadie es culpable cuando la enfermedad nos viene a visitar y se queda como el amigo gorrón a vivir para siempre con la disculpa que solo era por unos días. A mi amiga le daría ánimos pero lo que quiere igual es morirse de tristeza. Yo, respetuoso con la voluntad de mis amigas, la dejaría si no fuera que luego la echaría de menos. Y egoísta no quiero. Yo también estoy enfermo como cualquiera y no me gustaría morirme y que una amiga me achara de menos... Cuesta hacer amigas para que luego en un descuido se te mueran.
 
Para que un país se muera de hambre y enfermedad primero se tiene que morir su ciudadanía. Entonces, todo parece indicar que si mi amiga se muere se lleva con ella el país que tanto ama. Pienso que las crisis son titubeos del tiempo ya sean económicas o anímicas. La verdad se esfuma y deja espacio a las opiniones. Las opiniones siempre son cambiantes e interesadas... Los políticos nos utilizan como armas arrojadizas y papeletas necesarias para ganar la gloria. Somos pañuelos de usar y tirar en un valle de lágrimas. Los ciudadanos no sabemos a qué atenernos bajo este confuso panorama nacional. Y aún así, no quiero que mi amiga esté triste (menos se muera) y mi país se desparrame por el suelo... (Ahora que pienso, mi país no es el suyo... ¡Joder, dona, ahora si que estamos enfermos de verdad!).

5 comentarios:

  1. Bueno me haces reír, saludos a tu amiga, yo tampoco quiero que se te muera¡¡, bueno " se muera".

    Simpático post, feliz semana.

    Un abrazo a ambos.
    :)

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  2. Nadie, llegada la hora, se quiere morir. Ni ella. Su defecto no pensar lo que dice... Muchas gracias. Beso.

    Salud.

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  3. En mi Pais -en el que afortunadamente para ti no vives- enfermarse es para ricos y morir de tristeza es lo que nos queda.

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  4. Eso sí que es ser pobre. Lo siento. Muchas gracias. Beso.

    Salud.

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  5. No lo sientas porque me siento perro sin patas.

    No lo sientas.

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