¡Joder, dona!, hace un año que te espero para darte de comer y salir a jugar y no vienes... ¿y dona? Quién pueda regalarte vida que no se detenga...
Hoy hace un año que dona me
dejó. Hoy hace un año de una realidad
que ya es menos original. Cierro los ojos al mundo para que me impida
ver aquella verdad y no puedo borrarla de mi mente. Ya mi mascota
no ocupará ningún lugar en mi vida donde los
movimientos, las voces y las palabras no me dan tregua. Hoy solo estaré para ella y le escribiré. Hoy me fugo de esta vida y solo haré un
hueco en el tiempo para a ella, para recordarla, para pasar por mi
memoria nuestros íntimos recuerdos y me detendré en cada uno
de ellos para revivirlos: desde la imagen que me quedó grabada
la primera vez que la vi hasta hoy.
A dona con todo mi amor: dona
me dio lo que nadie supo darme; siempre estaba más allá
de lo creíble. Más allá de donde la existencia tiene su
verdad. Ella estaba más allá de todas partes. Más
allá de donde el tiempo se mide con un beso, donde las flores
nacen en cualquier época del año y se dejan descolgar insinuantes gotas de rocío entre sus
pétalos cada mañana para ahogar de pasión los corazones de los
enamorados.
Era dona
El beso tibio de una idea,
el sentimiento que emana del corazón.
Con ella ya siempre será verano
y el jazmín será su flor.
Me quedo con su recuerdo,
me quedo con su agonía,
en este día tan largo,
en este adiós tan imposible...
Yo... No se que decir cuando de dolor se trata. Nada de lo que diga lo aminorara.
ResponderEliminarHoy me quedo callada.
Siento en el alma que estés sufriendo,
Lo lamento de verdad.
Buenas madrugadas y hasta mañana. Muchas gracias. Beso.
ResponderEliminarSalud.