miércoles, 6 de noviembre de 2013

A la mujer (a todas)

"El hombre que olvida quién es, repite siempre sus errores". Este es el aprendizaje que he obtenido tras años de opresión. Háganme caso, provechen mi experiencia, reflexionen sobre la suya, acorralen el pensamiento y corran la voz... Somos los hombres quienes a lo largo de la historia seguimos buscando una relación estable con la mujer en igualdad de condiciones.
 
Algo terrible está ocurriendo y no nos damos cuenta. Nadie tiene memoria, pero yo la tengo, y además tengo pruebas.
 
El hombre, con la vida adquiere experiencia. Sin embargo, lo que más le permite aprender, enseñarse a ser un verdadero hombre de los pies a la cabeza, es en ese laboratorio familiar en el que la mujer es y será protagonista: psicología, sociología, ciencias sociales, derecho civil, física cuántica, etcétera.
 
Se trata de recordar, conocer es recordar, pero recordar a tiempo. Hay que saber reconocer la verdad antes de memorizarla. Si dice una mujer que nos interesa mejor olvidarlo, fijo son estupideces que nos perjudican el alma. El conocimiento como último eslabón de una cadena que comienza con la percepción, sigue con la investigación y comprobación para luego procesarlo en conocimiento razonado y guardarlo en la memoria como herramienta de respuesta ante situaciones de vida. Con dolor de corazón lo digo: no se debe tomar en serio a la mujer (a todas).
 
La memoria es una herramienta imprescindible para no repetir fracasos. Y ahora, hablo de mí para decir que, este razonamiento, sin duda acertado, no encuentra su excepción con mi esposa acostumbrada a tener siempre la razón y amén. Bien, pues una encuesta publicada en un periódico de prestigio nacional, reveló que tres de cada cuatro maridos no saben que no son culpables. Una tragedia que no tiene nombre.
 
Para los hombres sometidos a los caprichos de la mujer, se hace necesaria la consigna: "no olvidar". A los hombres les vendría bien tener y usar el conocimiento y la memoria porque a esto nadie le puede llamar igualdad, o si lo es, este es un país de lotófagos (seres de un pueblo de la costa septentrional africana que según la mitología comían flor de loto, y por tanto no podían recordar nada).

1 comentario:

  1. Diez de cada diez las mujeres tenemos la razón. Eso pasa en esta casa, casi siempre termino diciendo "Te lo dije" . Sexto sentido le llaman.

    Una cosa también es segura, ocho de cada diez hombres son culpables de lo que nos pasa pero ellos ni se enteran. La cosa es que hay que echarle la culpa a alguien y el esposo es el que carga con eso. Los considero de verdad.

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