sábado, 1 de febrero de 2014

Tú sabrás disculpar...

"Yo tampoco pienso cuando hablo pero no estoy segura de que eso caiga bien. A veces me paso de decir lo que siento y tengo que pedir disculpas".
 
Descalificar un comentario con respeto es sano. Quien escribe necesita que le digan las verdades a la cara. En determinadas coyunturas se puede o no coincidir con una opinión. No se debe ser nunca fundamentalista. Se pueden tener coincidencias, eso es todo. La palabra es libre y quien la utiliza lo debe saber, y respetarla. Igual que quien la lee.
 
La palabra también es un instrumento de chantaje e intolerancia, eso sí, siempre ha de jugar a dos bandas y con todos los colores. Son nuestras sempiternas querellas, hablo de literatura. Y en eso estamos cada dia.

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