Hoy está en casa Kristel, es día de descanso en el trabajo y ha venido a visitarme. Es un cielo mi niña, ay. Acabamos de llegar de Les Seniaes y, harto de dos semanas de campaña electoral, el día obligado por ley para reflexionar sobre el voto y por la Magdalena para dedicarle todo el amor a mi niña, me encuentro con unas y otros y no puedo sino morderme los nervios. Si no hay justicia que haya paz. Por cada incertidumbre una respuesta certera. Para hoy las risas, mañana Dios dirá. ¡Basta de politiquería!. Solo puede ganar una o uno y los demás perdemos como siempre. A pesar de que todos y todas somos un trocito de pueblo.
No digo que nos demos besos y abrazos, aunque no nos vendría mal: no nos ignoremos. Por quince días y uno no podemos enfadarnos. Queramos o no el lunes volveremos a ser vecinos y compañeros y amigos. ¡No se diga!. Que la miseria que llevamos dentro no se desparrame por el suelo y ensucie la calle. Mañana muchos niños y niñas recibirán el Cuerpo y la Sangre de Cristo en su Primera Comunión. Por nuestros hijos y nietos: Lección cívica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario