jueves, 23 de mayo de 2013

Si a Dios le vale cualquier tribuna...

Mi esposa y yo estábamos discutiendo esta mañana sobre la vida. Lo cara que está la vida y en particular la cesta de la compra... Mi esposa y yo es de lo que más discutimos, y no porque gastemos más de la cuenta, sino porque la cosa está más bien escasa.

Yo no me quejo. Si echo pestes de Rajoy y de su política financiera es por todos menos por mí. Yo me arreglo, me alimento de pastillas, y las peores, las de colores, son casi gratis... Antes no me las cobraban. Luego sí. Recurrí, y entonces me las volvieron a regalar. (En las SS son muy espléndidos). Pero solo dos meses. Ahora me las vuelven a cobrar y no admiten recursos.

Acabaremos como los fenicios cambiando gato por liebre o de vuelta al estraperlo. Que es lo mismo pero fuera de la ley. ¡Joder qué país!.

¡Tenemos derechos además de obligaciones!. En los años altos de la vida no está escrito que tengamos que vivir el invierno, yo vivo la primavera, pero de un tiempo a esta parte a Dios rogando y con el palo dando... Es mentira, y de las peores, que venimos a este mundo a sufrir: el mandato divino es ser felices, y yo, y usted, y todos y todas, y la María por Dios, estamos a tiempo de ser felices. (Si a Dios le vale cualquier tribuna... a qué espera).

6 comentarios:

  1. Y tu y el y el de allá y todos hay que ser felices como manda Dios.

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  2. Y no se hable más. Muchas gracias. Beso.

    Salud.

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  3. Tienes mucha razón, tenemos derechos... Y también izquierdos.



    :P

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  4. Tenemos, eso es. Muchas gracias. Beso.

    Salud.

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  5. Soy un triste. Necesito una cura urgente de alegría... Muchas gracias. Beso.

    Salud.

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