¡Vivamos!

"Estoy asustada y tengo un poquito ganas de llorar".
 

Mi hija bendita y yo tan feliz... Y ahora digo estaba tan feliz porque hay quien sufre en silencio... Yo sabía que las cosas no le iban bien. Y que el miedo... ¿cómo ser positivo entonces?
  

Sigue siendo miércoles pero ya por la tarde y las cosas no son igual que por la mañana. Sigo hablando de lo bueno y malo de la vida. Últimamente hablo mucho de la vida y eso es bueno, pero también es malo; a la vida hay que dejarla ir, no ponerle más trabas que las necesarias, y sin que las note. Ser sutil con la vida es bueno, pero sin pasarse, que sería malo que se enterase y en un descuido... Hay que enfrentarse a la vida con uñas y dientes ante las injusticias, ante el dolor, ante lo malo. Hay que ser positivo. Sería bueno no tapar el sol con el dedo y admitir que nuestra existencia no es una exclusión por falta de esperanza.
 

En nuestra sociedad las clases sociales son una realidad, y según la posición que ocupemos en la pirámide seremos o no, mereceremos o no, pasaremos hambre o no. Como la vida: hay quien tiene miedo a ser excluido. Callar a todo hace que te sientas pequeño y menos de todo un poco.
 

Me cuenta una amiga que está asustada y que tiene un poquito ganas de llorar... "La vida me ha tratado regular", dice. Mi amiga ha tenido que renunciar a cosas en la vida. Creo que mandaría su imagen de ahora al carajo por recuperar un poco de la de antes... Antes, mucho antes... Mi amiga confiesa haber venido al mundo de parte de la victimaria a matar. A matar su propia vida. Ella no ha cometido delito; ella no es culpable y aún así la han condenado. ¿Victimaria o víctima? Si tenemos que vivir, si vivimos, que no sea muriendo... ¡Ser positivos, por favor!. Vivir y no morir en vida. Que si la crisis, que si el dolor, que si la enfermedad... Discriminados o no, defendamos la alegría. Imaginemos la sonrisa alegre del bebé. ¡Vivamos!.