Aquí no me apeo

Sí, ya sé que dije que me apeaba aquí, pero fue por la mañana, y ahora por la tarde no me apetece, más que nada porque estoy de fúrtbol hasta las cejas... Entonces (y no es por mí), solicito a toda persona que le duela este país, no importa si trabaja o no (que será más bien que no); si ha perdido la esperanza o no (que será más bien que sí); si cree en la justicia igual para todos o no (que será más bien que no); si ama o no un espacio de gran impunidad que consume la confianza del pueblo... ¿Qué? Que mañana es lunes y tengo un palpito... Ay, dona, y entonces... Calla, por la María te lo pido. Una clase dirigente como responsable de actos sistemáticos de prevaricación, de corrupción o lo que sea a costa del erario, que está probado, que no es presunto, que no les importa lo que duele este país al pueblo, que nadie tiene autoridad moral intachable y muy noble, honrada, eficiente, responsable, voluntariosa, democrática, solidaria... Una clase dirigente de la máxima confianza... Sería un milagro que apareciera un juez a estas alturas que quisiera investigar la intimidad patrimonial distraída de toda la clase dirigente...

El fúrtbol me supera, pero la clase política... de la clase política mejor no hablar... Harto estoy de Bárcenas... de Urdagarin... Harto estoy de la oligarquía de este país. Qué hay de la alternancia... Qué hay de un ciudadano un voto... Qué hay de las listas abiertas... Y ahora no sé como se escribe esto... Mis hijas sí saben, pero yo no... Quiero que se rían: ja,ja,ja,ja,ja... ¿Es así como se escribe? Es para decirles que se dejan de reír, que el asunto es muy serio. (Ahora sí que me apeo).