No es por desanimar en sábado de los fieles difuntos, pero los seleccionados no son los nominados, y mucho menos los elegidos. Hay quien se siente satisfecho por ser seleccionado, cuanto más nominado... Y no hablo de Los Premios Goya.
Lo escribió San Mateo en los Evangelios: "Muchos serán los llamados y pocos los elegidos". Los seleccionados han tener méritos suficientes, incluso el inglés medio hablado y escrito para dar el siguiente paso, el de los nominados. Los nominados son los que pasan por el detector de mentiras, que no es otro que el responsable implacable de recursos humanos. Que de humano tiene más bien poco. Para ser el elegido hay que pasar por un sin fin de calamidades y un atracón de valerianas. Peo la historia la escriben los elegidos... a pesar de no resultar elegido para un puesto de trabajo.
No es por desanimar, pero no conviene guardar en el ropero el abrigo de invierno si se está seleccionado y nominado, que no elegido. Entonces, para no morir en el penúltimo intento, conviene disponerse de nuevo a conquistar nuevas aspiraciones de manera positiva, por encima de temores y emociones paralizantes, para ello, es suficiente sentirnos exitosos... no incomprendidos, que diría Calimero. Por favor, no desanimen. Va por ustedes, los seis millones de parados. Y los daños colaterales. Suerte y ánimo. Y salud.
Soslayo Gracias por participar felicidades por su blog.
ResponderEliminarSaludos desde Abstracción texto y Reflexión
Un placer.
ResponderEliminarSalud