viernes, 15 de junio de 2012

Para eso no hay remedio

Podría decir que en una universidad extranjera un equipo de científicos descubrió que, según la manera de comportamos en ocasiones, y hablo de preguntar y contestar, de reírnos, de remover el café con el dedo en lugar de una cucharilla, de las muecas y un tic nervioso imposible de evitar, es tan fiable como el ADN.
 
Cada cual se las arregla a su manera para disimular sus afectos cuando no le interesa que se sepan a una velocidad que ni su corazón le sigue. Y entonces se delata. Para eso no hay remedio. Cada cual es como es y no tiene que disimular a no ser que la verdad le duela en el alma. Lo cierto es que ocultar un sentimiento ante la persona que lo inspiró es imposible. Aún cambiando la silla de posición para evitar el sol y una mirada de soslayo. Igualito se comporta el amor.

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