lunes, 19 de septiembre de 2011

Cinco años y poco más

Veníamos del olvido y ahora resulta que nos comprometemos de lleno con una bitácora que actualizamos a diario pero que no es más que una página por escribir necesaria para remontar una crisis de habitación y un cuarto oscuro. Exoneración de todos los cargos. Cinco años y poco más. Llegó y se fue de la misma forma. Hablo de salvar un proyecto y una relación de amistad con argumentos sin pretextos, pero resulta que los tiempos han cambiado. Que ahora está de moda lo blanco impoluto: "el culpable que tire la primera piedra". Ya lo mal hecho no ridiculiza y las ofensas están de moda. Embellecemos los cementerios y los marcos donde pegamos las esquelas... "camino de los sueños rotos", pero no modernizamos los senderos de la vida. Ya uno de cada tres versos no encuentra destinatario. Somos pobres de ilusiones. Somos tan pobres que por no tener no tenemos ni un beso de despedida con amor en un lunes que no se entera que el verano se va. Ni un adiós agradecido tenemos para darle. Sin un por qué el calendario nos anuncia que el otoño ya está aquí y tampoco tenemos un mensaje esperanzado que ofrecerle. Ni un beso, ni un auténtico viernes de amor. Si alguien sabe y no es mucha molestia, que me diga, que me explique, no cómo se entrega sino cómo se renueva una esperanza. "El movimiento se demuestra amando". Qué hermosa puede llegar a ser una errata... Amigo.

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