Se trata de cerrar la puertas
(una y otra)
a cada lado de un mar.
Porque son puertas que chirrían
siempre a destiempo
(antes o después)
y un poco más cada día.
Ha de ser una sola puerta
(solo una)
y estará siempre abierta;
una única puerta,
y sin paisaje,
y sin mirada.
(Recodar a veces es morir).
Las puertas que chirrían en el alma,
ResponderEliminaren la mente cansada, que pide tregua,
la puerta siempre abierta, para dar la bienvenida
o para la inminente despedida.
Un placer leerte, besos y abrazos.
Eres muy amable. Muchas gracias. Beso.
ResponderEliminarSalud.