Con todas las de la ley

He mirado por encima la prensa y no hay nada que merezca la pena comentar. Bueno, hay lo de siempre, corrupción y otras miserias. ¡Joder, dona, así no vamos a ninguna parte!. Un país con tantos defectos como el nuestro amparado en la monarquía de la ley, ¿será un país o un sistema político que gira en torno a Rajoy?
  
Y eso que siempre digo que la política me aburre... Como el amor, siempre acabo igual, metiendo la pata, confiado y defraudo, pero dale que dale. Igual nuestro dios Rajoy es como la luna que solo calienta por una cara... No me estañaría, porque hay gente que siempre se arrima al sol que más calienta... Está claro, o hay más de un Rajoy o Rajoy tiene una cara oculta. Calienta para unos y no para otros que son la mayoría. ¡Joder, dona, así no vamos a ninguna parte!. ¿Por qué no puedo escribir alegrías? Me falta tu mirada... Con razón así no vamos a ninguna parte, digo digamos y digo yo que no soy dueño de todos mis actos. Mis debilidades y desavenencias son superiores a mis capacidades para hacerles frente. Y a pesar de ello y todo lo demás, de la falta de alegría, aún hay una esperanza que anima la fe. Una chispa capaz de encender una llama transformadora y, si me apuras, redentora (¡joder, dona, si resucitaras adiós todas mis penas!). Que la María me perdone, lo acabo de borrar, pero acababa de escribir que era peligroso creer en un dios cualquiera que no fuera poeta. No te extrañe, de un tiempo a esta parte ando de aquella manera intentando mejorarla, pero no hay manera. Hablo de la vida. Mi vida no, que más o menos la tengo calada, hablo la de los demás... Por cierto, ya sé de dónde me viene este estado de ánimo estupefaciente, recuerdo un titular: "la mitad de los parados no cobra prestaciones de ningún tipo". Como una amiga de antes, leo pero no entiendo, aunque yo acabo recordando... Si pudiera haría como ella, recordaría lo bueno y no lo malo. Solo lo que me interesa.
  
Mi amiga de antes tiene un gran corazón, es buena persona, y es una dama. Pero es apasionada... Y la pasión no es buena a no ser en el amor, siempre lo digo. Ahora que pienso... pues ahora que pienso niego la mayor, la pasión también es buena para el fúrtbol, según me cuentan.
  
Este país aún tiene prácticas dictatoriales, herencia de muchos años de represión y mesianismos políticos. ¡Que pena de país!. Así nunca construiremos una patria ni una democracia. Pero insisto, aún hay esperanza. Y si tuviera que apostar -no me gusta apostar-, pero se tuviera que apostar, porque estamos a tiempo, apostaría por construir una verdadera patria y una democracia. Con todas las de la ley.