martes, 3 de septiembre de 2013

Transparencia, señor presidente

El rol del gobierno en esta dominación imperialista y en el contexto de la presente crisis, lejos de superarla, asume políticas brutales en defensa de los intereses del gran capital y la gran empresa privada. Marx se moriría como los seis millones de trabajadores desempleados en estado de exclusión social.
  
Ante la desesperación del proletariado, el emprendedor, el trabajador autónomo, la pequeña y mediana empresa que no encuentra financiación en la nacionalizada usura y les obligan a cerrar, ¿qué hace el gobierno? Antes devaluábamos la peseta y ahora devaluamos el país...
  
Si es bien cierto que Rajoy no se marchará sin despedirse, sería conveniente que pusiera nombre y apellidos a los corruptos empezando por los de su partido, los que están y los que estarán. En cada noticiario, en cada mentidero público, es raro el día que no aparece un político del PP imputado, implicado, testigo o acusado. Que atienda las obligaciones de su cargo mientras no se vaya o lo echen, y que no deje pasar de soslayo la corrupción en su partido. Transparencia, señor presidente. Y Silvio Rodríguez canta: "lo más terrible se aprende enseguida y lo hermoso nos cuesta la vida...".

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