De asuntos propios y ajenos estoy que me vomito. Hoy, como que ayer, de asuntos inaplazables. Se pueden imaginar... Todo problemas. Y eso que soy el conductor y espero fuera. No existe nada en este mundo que no me altere el psique. En fin, porque ando justo de tiempo, en mi ausencia, por favor:
Si alguien le saluda devuelva el saludo y sonría; si alguien no se atreve diga... y sonría; si alguien necesita de su mano, su abrazo y un poco más, lo que sea, no se lo niegue y sonría. Usted sonría. Y si alguien le mira de soslayo, ay, diga sí. Siempre encontrará un motivo diferente para agradecer a la vida un día como si no pasara nada. Aunque pasa. Mire a tu alrededor y verá que verdaderamente pasa, pero no le niegue a nadie una sonrisa, no sea miserable. Con perdón.
A mí me gusta mirar a mi entorno cercano, solo que a veces no soy capaz de mantener la mirada y miro a las alturas, pero no buscando los culpables que están aquí abajo, sino un pedacito de cielo sin quejas ni tristezas. Sin la pobreza y la enfermedad que a todos y todas nos abraza (perdón por la redundancia). A pesar de los pesares, ojalá nunca deje de sentirme agradecido de las personas que me rodean. De ustedes si me leen. Sean felices.
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