Un cambio en la vida de una persona puede (qué digo puede) está a punto de salir del horno. No depende del azar sino del azahar. La vida de una persona cambia sin más. Hoy es lunes y es un día feliz como siempre. Si destino o porvenir no sé. La María ha llamado para cambiar la vida de quien es más una bendición que persona. Nada es predecible en la vida. (Conjetura reservada).
Se pudiera pensar que la vida es un sueño, y realmente lo es. Hablo de tener fe, esperanza, hablo de algo concreto: un puesto de trabajo y sentirse útil. Sé que le pagarán un salario pero (que me perdonen los 2 millones de hogares donde no entra un solo euro) no importa porque hablo de salud (la que estaba a punto de perder de nuevo). Luego de superar un cáncer, como humanos, gritamos a los cuatro vientos con las escasas fuerzas que nos quedan que hemos vencido a la muerte. Y sí, pero no, porque la cosa no acaba con vencer a la muerte, nos tenemos que demostrar que seguimos siendo útiles, necesitamos saber si verdaderamente valimos para algo más que ser héroes... No basta con vencer a la muerte, hay que demostrar sin ningún género de dudas que estamos vivos. Y el juez es despóticamente caprichoso.
Inesperado el acontecimiento. Las cosas están cambiando para mejor. No pierdan la esperanza. Hoy el vino corre de mi cuenta. Sean felices.
No hay comentarios:
Publicar un comentario