Llevo en busca de buenos deseos e intenciones desde que empezó este año 15 y no encuentro nada que merezca la pena. Todo estupendo pero a base de esperanza. Y decir esperanza es decir espiritualidad imposible: todo material. Con los años me he vuelto materialista como casi todos.
Caritativo, casi bendito, con buenos propósitos, apenas tengo lo que merezco. ¿Qué le voy a injertar de mi vida a Ian, por nacer? ¿Año nuevo vida nueva? De promesas incumplidas están los cementerios a rebosar. De volver a empezar y que alguien me evalúe con amor. Permanecer en los años altos en la mentira disimulando como si no pasara nada, como si fuera una persona confiable acrecienta la quiebra. Camino de la armonía se llega al equilibrio que cultiva el amor.
En este año 15 es necesario que los humildes de corazón salgan de la pobreza que debieron salir hace años y alcancen la estabilidad que unifica el amor. Los humildes de corazón desesperados ya no aguantan más latrocinios y actos criminales.
La vida, nuestras vidas piden perdón porque quieren ser humanas con humanidad. No podemos mantenerlas por más tiempo bajo el manto de la soberbia de los más poderosos. Derecho a la dignidad. Derecho a la vida. Derecho al amor. Si existe un tiempo para nacer y otro para morir, para este año 15, porque nos urge actuar y ser, pensar en nuestros semejantes de interpretaciones intransigentes. ¡Basta ya de no entendernos!. Es hora de desenmascarar la idolatría de los que siempre ganan. Hay poesía suficiente para explicarnos cómo... Sí. Para este año 15, Eros y no Tánatos.
Quiero ser poeta, no poetisa, quiero ser poeta y morir de amor. No hay muerte más sublime que la de morir de amor.
ResponderEliminarNo sé.
ResponderEliminarYo tampoco sé porque sigo viva.
ResponderEliminarPor amor. Sin duda.
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