Gentes de mala fe.

Hay gentes de mala fe. No hablo de fe religiosa, sino humana. Son gentes que hacen el mal para alcanzar sus intereses. Pero no dejan de ser inocuas e insignificantes. Solo se hacen daño a sí mismas. Lástima de miseria: Gentes de mala fe.

Una persona de mala fe tiene seguidores o consentidores también de mala fe con el fin de convertirse socialmente en personas malas a conciencia. Desgraciadamente, las podemos encontrar por todas partes. Van sigilosas y se pierden entre la gentes de soslayo para pasar desapercibidas. ¿Audacia, sagacidad? Estupidez solamente, porque carecen de originalidad. No tienen ni coraje para enfrentar el daño que van creando a las personas de buen corazón. Y nunca dan la cara por los correveidiles que representan o dicen representar. Tampoco dan la espalda porque tienen miedo a las consecuencias de sus maldades que asumen sus seguidores o consentidores. Son irresponsables. La lealtad nunca fue virtud en esta gente. Siente aversión hacia todo y todos, son detestables. Hay gentes de mala fe que además de estúpidas son lo siguiente. 

Advierto que algunas de esas gentes pueden ser inteligentes y de hecho una lo es, tengo pruebas. Sé de una mujer que asume en una misma personalidad la cualidad de estúpida además de lo siguiente. Esa persona a la que me refiero es inteligente y puede entender la lógica de la maldad. La acción del malvado siguiendo el patrón de la maldad. Colindancia perversa. Vecindad dañina. Gentes de mala fe.