martes, 2 de diciembre de 2014

Es cuestión de tiempo.

Los sentimientos progresan con una firmeza y solidez inexplicable; no valen cantos de sirena, tampoco influencias de nadie. Mandan los sentimientos. Y los millones de ciudadanos y ciudadanas que los exigen como suyos. La sociedad ya está harta de malas noticias, quieren sentimientos fidedignos, brazos pegados a hombros aunque solo sea para escuchar.
     
Cada cual va a lo suyo y deja de lado lo que tiene que ver con la esencia de la vida, con el amor, y la salud. La salud siempre presente en los años altos de la vida. 

No le damos la importancia que merece la salud, el amor y a ese colindante que nos mira de soslayo. Al pensamiento solidario.
    
En la actualidad que vivimos, por razones que no alcanzo a comprender, la mayoría de las personas conscientes, nobles de pensamiento están a esto de dar en loco. No saben qué hacer con los embates violentos que padecen inmersos en los diferentes desequilibrios económicos pero también psicológicos. Frustraciones y desalientos, angustias y depresiones con resultados imprevisibles. Alteraciones del psique que ni la María es capaz de comprender. Inaudito. Lamentable la situación que vivimos. Pero aún y así, debemos confiar, nada está perdido, la armonía y el equilibro mental que alimenta el buen amor proporcionan inspiración a la santa poesía. Es cuestión de tiempo.

4 comentarios:

  1. Todo es cuestión de tiempo, mi amigo. El tiempo es generoso, aún cuando no lo parezca o la lluvia no cese...

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  2. Nada que objetar. Los años altos propician el buen amor. Beso.

    Salud.

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  3. Yo al tiempo le pedí tiempo y el tiempo me contestó que con el tiempo tendría tiempo....

    Saludos

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  4. Sino París, porque ya no está de moda, siempre nos quedará el tiempo para compartir... Muchas gracias.

    Salud.

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