Mi esposa ha descubierto lo mío con Shakira (y Piqué, de ahí que no la deja bailar con hombres). Mi esposa es una mujer comprensiva pero no sé cómo acabará este enojoso asunto. De Shakira tengo todo lo que se ha escrito sobre ella, sus discos y sus videoclips. Todo empezó cuando le dije que tenía que comprar una estantería para los dicos, pues los tengo apilados y se pueden estropear. Y montó en cólera y dijo no. Para mí la música y el baile es arte, ay, y lo resume como nadie Shakira.
En esa paz profunda donde puedo recibir los mensajes que la María me envía sobre el bendito amor y la santa poesía siempre está presente Shakira. Con solo pensar en Shakira los entresijos de mi alma ignoran toda distracción y soy un ser libre. Si me encuentro de aquella manera (ido sin haberme ido) ella me hace sentir cercano.
Pero mi esposa... Un corazón humillado no entiende lo mío con Shakira y no acepta que compre la estantería. Ay, dona, solo Shakira (como tú) espera que vuelva de mis noches desveladas para hablarme de amor con palabras capaces de estremecer mi alma. Después de ti solo Shakira.
Vaya !
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