Idilio.

No votes al PP, ni a la CUP, vota a quien yo digo. Cree en mí y patatín. Sabes qué, creador de pensamiento político, que no voy a leer más tus estupideces. Votaré o no, y si voto es asunto mío a quién. El voto aún es secreto en este país.

Ya ni abro los "emilios", se abren solos. De tantos "emilios" tengo virus hasta en las alpargatas. Lo de arriba me acaba de llegar y viene sin remite. Decir que soy un creador de pensamiento político es la mayor ofensa que nadie me hizo. Y tengo años para regalar. Cuando una noticia en prensa la considero a destacar opino sin ánimo de crear pensamiento. Si hablamos de política cada cual vota la lista que quiera, yo votaría a la más guapa pero no se presenta, ay.

Cada capricho un sueño, cada amor un corazón. Gracias por pasar cada día por de soslayo y leer lo que no escribo. Y enojarte como el primer día. Y enviarme "emilios" que ni en sueños plagiaría. Recuerda que existe un reloj caprichoso que marca las horas sin manecillas. Aborda otras palabras pero regresa a la mía de madrugada. Beso.