Agua tibia de lluvia,
alma, corazón y sangre;
tiemblan tus manos como sol en el río:
tienes el amor inyectado en las venas.
Dolorida vives sin vivir en ti.
Al pintor que pinta un mar estremecido,
mar de tus anhelos le pides que pase por ti
y se lleve tu amargura como un rayo de luz.
A quien nació del viento sin nido
-un pájaro sin alas-,
sin rumbo y sin vuelo:
el amor mueve montañas.
Y la fe también.
Versos tristes llegan como saetas directas a mi corazón, que hoy entre lineas han llamado cobarde.
ResponderEliminarProfunda reflexión, si lo es. Beso.
ResponderEliminarSalud.
Me acorde de ti -¿Otra vez?- toy viendo a Cantinflas.
ResponderEliminarPara mí un casi dios del cine...
ResponderEliminarTres posts, ¡TRES! y los tres los mando al borrador, blah soy un fiasco.
ResponderEliminarBuenísimas de soslayo.
Buenas madrugadas. "No hay quinto malo". Beso.
ResponderEliminarSalud.
¿Cinco? Demasiados por hoy o ayer ya no se.
ResponderEliminarDeberías de saber...
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