jueves, 23 de diciembre de 2021

El uno y el otro, si no fuere.

"Estoy convencido de que mañana, si la María me acompaña y la PCR me sale negativa, me invitarás a tomar café y unas pastas de té". (Recuerda que el café corre de tu cuenta, de la mía las pastas de té). Lo digo a veces, la vida entre nosotros siempre ha sido así: tú, por un lado, yo, por otro. Y nunca llegamos a encontrarnos, como las líneas paralelas. Si alguien me leyera -cosa rara-, podría pensar que lo nuestro es imposible y no, o al menos yo no quiero que lo sea. Tanto escribí acerca de nuestras desavenencias (y tanto te ofendí) que lo nuestro ... (lo nuestro y dale). Ni el sentimiento mutuo ni el valor de las ideas. El uno y el otro, si no fuere. ("No permitas que te doble la mirada. Clava tu mirada en sus ojos"). Quizás el amor llega por casualidad y por casualidad se va. La vida es caprichosa a veces. Cuando algo no me entra en la cabeza es mi consejo volver a la escuela y empezar por los ejemplos para que nuestros hijos no cometan los mismos horrores: declamar poemas de amor a porcientos. No se equivocó Karl Marx cuando afirmó que la estructura económica define todo lo demás. Gracias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario