jueves, 24 de octubre de 2013

Ser viejo o no

Pensando en algo interesante para escribir, recordé que un amigo el otro día me preguntó: ¿por qué dices que eres viejo si no lo eres? Para que me respeten, le contesté. ¡Qué estupidez!. Será o no una estupidez, pero si me las doy de viejo es simplemente para que me respetan. A pesar de que me jode que me llamen señor. Pero viene de lujo para escribir buenos consejos en de soslayo y que me lean. ¿Quién sino me iba a leer, y menos aceptar mis opiniones y reflexionar sobre ellas si supiera que soy joven?

A mí amigo no le puedo aconsejar porque sabe que no soy viejo, pero si me leyera sin saber que soy un joven que se hace pasar por viejo (tampoco sé si me lee) tal vez le hiciera reflexionar sobre ciertos comportamientos que le están perjudicando el alma. Digo alma y digo psique, naturalmente. Él algo sabe, lo que no sabe es por qué reta permanentemente al existencialismo profundo de su mente...
 
No digo que aún no haya hecho la mili, pero poco más (palabrita del niño Jesús). Por eso mi amigo dice que es una estupidez. Ser viejo o no es lo de menos, lo de más es escribir, y para ello me enseño con los libros, con las amigas, con Eugenio, y reconozco que desde que frecuento de soslayo soy más feliz.
   
Recordando mi juventud, me doy cuenta que me estoy acercando peligrosamente a la muerte; la juventud es una constante fiesta del espíritu: el cuerpo aguanta y la inconsciencia gobierna. Recordando mi juventud me doy cuenta que solo viviendo los años altos de la vida siento el ímpetu derramado en noches con luna de pasión sin darle importancia al día de mañana, al fin y al cabo, el mañana es un invento del reloj. Me gusta ser viejo, pero no como otros viejos que son insultantemente precavidos para casi todo, incluido el amor, es decir, aburridos y tristes de morir. Yo, de viejo, disfruto coleccionando discursos, diseñando estrategias, imponiendo decretos, fijando horarios, sugiriendo acciones, incluso, asesinando ilusiones. (Y a pesar de todo, echo en falta mi juventud).

1 comentario:

  1. ¿No eres viejo? He vivido engañada entonces, espero al menos no seas un jovenzuelo porque entonces muero

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