Hoy es el día, lo presiento, le dije a mi esposa. Es incómoda la confrontación de lo que eres con lo que puedes llegar a ser, de lo que tienes con lo que puedes tener trabajando con inteligencia, retando a tu enemigo, entregándoselo todo, menos lo que necesita. La victoria no suele acompañar a quien se esconde en el rincón donde se ocultan los miedos y las pausas. Es primavera, hay tiempo para que florezca el azahar en Les Seniaes. En Les Seniaes florece el azahar todo el año... Ay, amor, la vida no es de quien sueña con un futuro, sino de quien vive con un propósito de futuro. A Dios gracias y al beneficio de los años vividos se cumplió la profecía: hoy es el día. Además, ha sido investigado por la ciencia y la santa poesía que supera a la ciencia: "lo que no cura el amor, no hay médico que lo sane". El pasado y el presente no están tan alejados como a veces nos gustaría creer: la vida es gestión de riesgos, y merece la pena asumirlos. "No hay plazo que no se cumpla ni deuda que no se pague". Mezquindades y hostilidades aparte, admitamos que el día de hoy estaba escrito en de soslayo con la cautela que le otorga el milagro bíblico de la multiplicación, pero no de los panes y los peces, sino el de la que nunca fue la primera de la fila y llegó la primera. (Y sí, se alejarán lentamente hacia el olvido... si antes no baja el ataúd y sube la soga). Gracias.
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