"Me decía un viejo (y sabio) amigo que los problemas sin solución no son problemas porque no está en tus manos arreglar los estropicios, y si la tienen tampoco lo son porque puedes luchar y buscar arreglos. ¿Y encontrarlos? Ah, eso solo lo dirá el tiempo". (Tino Pertierra).
No le falta razón al señor Pertierra, eso sí, en la primera parte del consejo, en la segunda, la de encontrar los problemas, no creo que sea cuestión de tiempo. Los problemas abundan y si hablamos de problemas creados por la mala gente, abundan más. Y para solucionarlos, incluyo los libres de culpas y los exentos de dudas, hay que ser buena gente. Estar en la vida por estar, o para hacer daño y crear perjuicios, por absurdo que parezca, hay que ser mala gente, y esa gente no sabe lo que se pierde. ¿Se aprende a ser buena gente? "¿Y a encontrarlos? Ah, eso solo lo dirá el tiempo". No soy de mucho pedir perdón, pero a la fuerza ahorcan: el tiempo ha hablado y lo que se ve ya estaba antes de verlo y fue hecho de lo que no se veía. Esa mujer y su esencia. Con el tiempo no llegó a ser ni ambientador de malos olores. Incluir el amor en su vocabulario, sabiendo que para el amor y lo dicho arriba el tiempo es el mejor aliado, ay. Mala gente. Quien ama da tiempo y espacio. Quiero decir que el amor genera poesía, el tiempo genera espacio y la combinación de todo abono para una relación humana y duradera. "Los problemas sin solución no son problemas porque no está en tus manos arreglar los estropicios". (El tiempo no llena un vacío, pero fortalece aquello donde se invierte de corazón... si la mala gente no lo convierte antes en un estropicio). Gracias.
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