Soy esposa, soy madre y soy católica, pero sobre todo soy un ser humano y quiero decidir sobre mi cuerpo. ¿Y entonces?
¿Habrá quien cree en Dios y nunca tuvo la menor duda de que los homosexuales son hijos de Dios? ¿Habrá divorciados que quieren seguir practicando la religión cristiana? ¿Las mujeres deben tener dignidad jerárquíca en la iglesia? ¿Unidos hasta que la muerte nos separe y todos los hijos por la gracia de Dios y el pan nuestro de cada día? Francisco verbaliza de soslayo esta realidad. Veremos.
Por cierto, y esto más que una estupidez es una duda existencial, ¿alguien sabe dónde está la otra mitad del medio ambiente?
Todo un cuestionario de complicada respuesta...si existe una respuesta!
ResponderEliminarSaludos
Hoy amaneció de aquella manera... Muchas gracias.
ResponderEliminarSalud
Ay tu chiste, si no fuera porque es malísimo me botaría de la risa. Se agradece la intención.
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