Porque vas hacia el adiós.
Porque abrazas el olvido.
Porque acurrucada en el silencio
te quedas sola al llegar el alba.
Entre las brisas del mar y sus brumas,
en las buenas madrugadas,
donde brillan los paisajes marítimos
estás tú, tras el cristal.
Qué poema más bello, me resulto muy grato leerlo.
ResponderEliminarGracias por compartirlo en tu blog.
Eres muy amable. Muchas gracias.
ResponderEliminarSalud.
Realmente intenso...
ResponderEliminarSaludos
Muchas gracias.
ResponderEliminarSalud.