Mi espacio personal.

A Patricia y su palabrería no la soporto. (Es a Rajoy a quien no soporto pero tengo que disimular. Una amiga no quiere que lo nombre. Están en mí sus fechorías, si no lo nombro lo tengo que vomitar por algún sitio. Quien pueda elegir que no elija una amiga enojona... ¿Qué me llamaste? Perdón). Patricia quiere trabajar y yo quiero pasear con Ian y con ella. ¡Joder, dona, en los años altos todo es más complicado!. ¿Y entonces? Yo no quiero morir de éxito, quiero vivir y saber qué ocurre en mi entorno. Así que no me queda otra que seguir escribiendo el día según mi opinión y estado de ánimo. 

Hoy, en Les Seniaes, paseando con Ian y Patricia me di cuenta que es faena necesaria para mi salud. Y que adjunta un plus a mi mente absurda apacible. A veces confundido entre la palabrería de Patricia pongo el piloto automático y me dejo llevar por un camino pegado a la observación, hasta que me doy cuenta que eso es como pagar la matrícula en la facultad e ir de oyente o no ir. Si pago la matrícula quiero participar. La teoría sin la práctica no vale. "Si no tienes dos años como mínimo de experiencia no pierdas el tiempo ni me lo hagas perder".

A Patricia incansable de palabra le dije que no quería ir de oyente por Les Seniaes. Me sobra teoría y me falta práctica. No quiero observar como pasa la vida. No quiero poner el piloto automático y andar por caminos que degeneran en los aspectos abstractos por lo tanto intangibles. Por más poesía. Quiero existir en las personas que quiero y acercarme a sus preocupaciones que no distan de las mías y otras gentes, algunas excluidas socialmente. ¿Comprendes?

No me pidas que escriba lo que siento cuando no lo siento... De la pobreza se sale, un puesto de trabajo, fe, una mano, un brazo pegado a un hombro: solidaridad. De la exclusión social no. Si te excluyen o autoexcluyes te puedes dar por jodido. Cualquier vida genera en mí curiosidad. La tuya. Hoy puede ser un gran día en tu camino y el mío. No perdamos el tiempo con palabras ociosas. (Lo uno no quita lo otro, recuerda: cuando quieras soñamos juntos).