Nadie duda de que la unión hace la fuerza, sin embargo, se levantan corrientes opositoras internas en lo que respecta a una unidad más profunda. La familia. Cuando se hace daño a la familia crece el caos, se hace añicos la convivencia y el sentido de vecindad hasta un mar profundo. Si una corriente tiene fundamento, qué nos espera en adelante, qué decir que no duela. La dama que no me deja ir y mi usurero preferido no me reciben. Al parecer he dado en loco y mi economía ha entrado en números rojos. No son sospechas, son certezas. Y Vitorin canta: "nuestra sociedad es un buen proyecto para el mal". Si por un descuido lo que espero me hagan en la cabeza desde hace mil de años (créanme que no miento) se la hicieran también a la sociedad en franco proceso de desintegración, la anarquía se haría dueña del país. "¿Qué provecho obtiene un hombre si gana el mundo entero, pero pierde su alma? (Mateo 16:26.). Para que se entienda: Un país y su alma. Estar juntos puede ser una careta, estar unidos puro interés, pero actuar con unidad es amor verdadero. La familia, y los hijos primero. Gracias.
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