La palabra se respeta.

Una persona atrapada en una vida triste, le puede costar su humanidad, de tenerla. Hay un tiempo para tomar café y jugar al mus, y otro para aprender de todo lo que nos resulte de provecho, y luego, llevarlo a la práctica, demostrando, sin dudas, de lo que podemos hacer por los demás. Eso sí, cuando el asunto llegue al caso, ahora no, ahora no toca, ahora es la hora de pasar cartitas de quinceañeras enamoradas por debajo del pupitre. (Para ir de político te falta un hervor). Quisiera que a todos nos llegara el momento de ser nosotros y comenzar de cero. Siempre estaré dispuesto a partir de cero. Pero yo soy güelu y no necesito estar de acuerdo con nadie, además, nadie para mí, desde ayer... Ayer fue un día penoso. Cicerón dijo: "La vida de los muertos está en la memoria de los vivos". Para mí estás enterrado en el cementerio. La palabra se respeta. No estás muerto ni estás tomando cañas, pero estás enterrado en el cementerio. Para a ser uno mismo, como para morir, hay que estar vivo. Oiga usted, en la vida lo que se ve fue hecho de lo que no se veía. ¿Comprende? "Cada uno trata a las personas tal como es interiormente y proyecta un modus operandi que transparenta lo que desconoce". Y dice para sí: "No te necesito, y de ante mano te doy lo que mereces: Menosprecio". Pero eso no es más que la línea de un comportamiento egocentrista. (Una persona atrapada en una vida triste, con vacíos, miedos, prejuicios y dominada por sus delirios). Gracias.