No hay mercado y no hay disculpas y el cinismo está de moda para los dueños de los partidos y las cuentas que auditan en ejercicio de la autoridad que les confieren los votantes. Si pienso bien digo probes, no saben, ya aprenderán. Si pienso mal digo probes, no saben lo que les espera por no venir aprendidos de casa. De cinismo nos estamos pasando de frenada. Es fácil ser referencia en asuntos presupuestarios si se sabe lavar. En el lavadero municipal se lavan trapos sucios y estribillos para imprevistos. Y me explico: Cuando los dueños de los partidos escriben un bolero y deciden llamarlo programa electoral dejan una parte del estribillo para imprevistos. Pues a pesar de ponerse un sueldo por encima de la media de sus votantes y dejar una parte del estribillo para imprevistos no llegan a fin de mes. Ocurre en pueblos que no cumplen objetivos de déficit. Políglotas los políticos se expresan en lenguas incomprensibles para los votantes. Ni presentan los presupuestos donde los deben presentar a tiempo y levantan sospechas de malversación de dinero público. Antes había que ir a América para hacer las américas y ahora no compensa. Los profesionales de la corrupción son avaros y los políticos honrados... En fin. Gracias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario