"El mayor delito es el suicidio, porque es el único que no da lugar al arrepentimiento". (Alexandre Dumas).
Hay conductas capaces de atarantar una mente absurda que de por sí ya está más allá que el olvido. No crean ustedes que escasa de poesía enmudeció la palabra decidora porque hablo de mí y la palabra es mi espada cuando decido enfrentarme a la ira de los endiosados. Y qué pena de mujer que se dejó llevar por la ignorancia teniendo a su alcance la sabiduría de un libro. La felicidad llega por el camino del trabajo bien hecho, del saber que es querer, del que quiere siempre puede, del que nada necesita a cambio de nada porque tiene todo cuanto necesita... ¿Comprenden? A veces para alcanzar la felicidad hay que insistir, y vale entonces si es cuestión de insistir porque para insistir nacemos aprendidos. A veces, y siempre, debemos insistir en busca de la felicidad y en defensa de la familia, y los hijos primero, con la palabra... Quien se atreva a manchar la honradez de una familia con la suya la lave. Y si tiene la pata de atrás metida en un tiesto y no la puede sacar, Dios, nuestro salvador, según me cuenta una amiga creyente, tiene diseñado un futuro que cambia suicidio por arrepentimiento. Gracias.
Muy bien dicho, escribir un libro exorciza el alma.
ResponderEliminarSaludos desde lejos
Cierto. Gracias por pasar y comentar.
ResponderEliminarSalud.