La verdad y la mentira, si hablamos de literatura, con perdón, no tienen la importancia que tienen en la vida real. La verdad y la mentira caben en "El Quijote" (ay). De ahí que sea persona de no escribir siempre la verdad. Y a pesar de todo, y solo a veces, escribo la verdad y por su trágica consecuencia, pagaría lo que no tengo porque fuera mentira. Viene la tontería al caso porque mi esposa que jamás perdió ni un minuto de su tiempo en leer la verdad y la mentira que realmente interesa en de soslayo, se deja decir que por qué no abro una cuenta en facebook y respondo a mi libre albedrío a los "pos", o como se diga. Que disfrutaría de lo lindo ahora que los ansiolíticos están de rebaja porque hay gente que escribe barbaridades con la cara de ir a misa y nadie responde. Al parecer hay quien "copia y pega" el orden del día al dictado del filósofo Paulo Coelho como si fuera la Palabra de Dios. Mi esposa cree que como desquiciador llevo comisión en la farmacia de guardia. En fin, si es verdad que ponen a güevo respuestas contestatarias pero no saben o no quieren ¿? Un güevo es un güevo y seis media docena. Así Los Panchos: "Y así pasan los días y yo, desespera(n)do, y tú, tú contestando, quizás, quizás, quizás". Gracias.
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