jueves, 23 de agosto de 2018

"El movimiento se demuestra andando".

Según el filósofo griego, Diógenes: "El movimiento se demuestra andando". Y el pueblo de Patricia no iba a ser menos. El pueblo de Patricia se toma la vida en serio: fomenta el empleo estable, ayuda a los más necesitados, organiza caminatas para despejar la modorra, eso sí, pero seguro que son cosas mías que a nadie importan: el ruido insoportable se mantiene en fiestas hasta altas horas de la madrugada ("… y hubo tanto ruido que al final llegó el final", canta Sabina). Y las bebidas alcohólicas se reparten por las calles a pesar de saber como se sabe que está prohibido por ley. Alguien no sabe que tomar bebidas alcohólicas por las calles está prohibido por ley y penalizado con multa de hasta 600 euros. (Aunque sean gratis).

De vuelta de vacaciones me cuentan que en el pueblo de Patricia en fiestas salieron a la calle unos y otras con el carrito del carrefur lleno de bebidas alcohólicas y las repartieron gratuitamente (previa presentación del DNI). Mal asunto. También es que los viejos no puedan dormir por tanto ruido sin horario. Para un viejo dormir es tan importante como para un bebé. A mí el ruido me mata, pero son cosas mías que a nadie importan. Como repartir alcohol por las calles. (Tú tira pa'lante). Gracias.

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