viernes, 13 de febrero de 2015

Ian, a punto de nacer.

Patricia me atarantó en el paseo por Les Seniaes. El tema no era el que debiera: Ian, por nacer. No, era que no tenía agua en casa y que yo sí. Mi amor, habrá avería en la calle, además, y no te ofendas, me importa un carajo que no tengas agua en casa. 

¡Joder, dona!, aquí cada cual va a lo suyo y así no vamos a ninguna parte. Patricia se tiene que preocupar por Ian, por nacer, y el alcalde por el agua que no hay. Pero si es una avería se arregla como otras veces. No es la primera vez que nos quedamos sin agua por una avería. No conviene dar importancia a las cosas que no la tienen. 

Como en las ciencias exactas, sinónimo de las matematicas, si hubo un problema y se le dio solución, para otro igual, la solución la misma. Patricia que se preocupe por Ian, por nacer que ya es hora. Y a mí que no me atarante que bastante tendré con lo mío cuando sepa lo qué es... Esta vida pide otra y la quiero compartir con Ian. Quizá este fin de semana... Ian, a punto de nacer.

2 comentarios:

  1. Esta claro que tienes ya el fregado y la comida echa por eso te da igual la comida, seguro que Dona lo hubiera entendido. Forza

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  2. Ora si vas a saber lo que es amar a dios en tierra de indios. Sé lo que te digo.

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