martes, 9 de agosto de 2011

Una pregunta:

¿Qué estaría dispuesto a dar por recuperar su juventud? Antes de decidirse, tiene que saber que tendría que unir a su juventud las convivencias soñadoras de ahora sin recuerdos del pasado. Confieso que yo daría cualquier cosa por recuperar mi juventud y unirme a las vivencias soñadoras de ahora sin asomo de mi pasado. Tengo más recuerdos que esperanzas y eso no es bueno por viejo que uno sea. A pesar de que la época que viví en mi juventud no fue para nada agradable, no creo que los jóvenes de ahora tengan lo que deben tener. No les damos la vida que se merecen. Es un porvenir adulterado y con pocas expectativas. Parafraseando al poeta Ángel González, aún decepcionante, habría que saber cuándo tiene previsto venir ese porvenir. Mucho se habla del porvenir pero nunca viene. A veces pienso que la vida es un fraude. Yo estoy con los jóvenes de hoy en día que viven y no temen el futuro por muy anticonceptivo que se augure. Con esa juventud que no se resigna a establecerse en la pobreza heredada, y que quiere ser la fuerza inspiradora en el cambio social que a todos nos debiera conmover. Espíritu inquieto y alegre que les motiva el alma donde sacan las fuerzas con un estado de ánimo soñador. Estamos necesitados de esa juventud emprendedora. Vivimos como si el todo dependiera de nosotros, como si este mundo material que nos levanta como la espuma y nos deja caer de lo más alto sin piedad que construimos entre todos mereciera la pena. Pena de mundo, sociedad insolidaria, interesada y manipuladora, traidora con sus principios y sus valores. Albert Eintein dijo: "Triste época la nuestra. Es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio". Es de ley renovarse, es fundamental si queremos avanzar. La crisis actual no puede dejar en la cuneta nuestras ilusiones y nuestros sueños más preciados. (De saber que acabaría nombrando la crisis hubiera dejado la página en blanco como ayer. Estoy harto de ella y de los que viven a su costa explotándonos).

No hay comentarios:

Publicar un comentario