lunes, 8 de agosto de 2011

¿En qué momento uno puede perder la noción lógica de las cosas?

Abraham Lincoln dijo: "Se puede engañar a una parte del pueblo todo el tiempo. Se puede engañar a todo el pueblo una parte del tiempo. Lo que no puede hacerse es engañar a todo el pueblo todo el tiempo".

Hoy me levante al alba como a veces, y no quise escribir... Me quise probar. Simplemente quería saber si podía pasar sin escribir... Y como no me fío de mí, y menos de mi ordenador que me ordena, me acerqué hasta Valencia por si un aquel. Fue llegar a la Calle Colón y darme cuenta que había sido una mala idea. El tráfico, el enfado... el enojo... la ira... la policía... ¡Mucha, mucha policía!. Muchas prisas, muchas... Mucho de todo y todo muy estresante, pero tenía que probarme y me probé, en cosa de una hora ya estaba sacando el billete de vuelta a casa... Por lo que pido disculpas por retrasar el comentario de hoy, opinión o lo que sea. Bueno, pero ya estoy aquí... Y saben qué, la ciudad no es para mi -algo que ya tengo escrito por ahí-. Y a lo que iba. Y ahora estoy convencido que ya no puedo pasar sin escribir... Cuando salí bien de mañana de casa ya sospechaba que no podía, pero uno es viejo, y no se atreve a cambiar si no tiene claro por qué y lo que va a perder o ganar en el cambio. Quiero decir, que no dejaría de escribir sin saber qué puede ocurrir si lo dejo... Disculpen de nuevo, creo que después de unos cien comentarios en este blog, ya voy cogiendo confianza y mis vanidades empiezan asomar... Confío no ser tan estúpido como para no considerar las consecuencias en la balanza de lo necesario. Pues bien, como aún tengo el tinglado metido en la cabeza sin procesar, hoy voy a dejar la página en blanco.

-¿Otra página en blanco?

-Sí. Tengo que darle tiempo al tiempo... Mañana, hablaremos del amor y otros besos quizá para siempre. No pierdan la oportunided de ser felices. Que pasen un buen día.

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