sábado, 13 de agosto de 2011

Como un grano en el culo

En mi pueblo estamos en fiestas, y aquí los vecinos tienen por costumbre, dicen unos y tradición otros (que si llega a ser lo mismo al menos en algo están de acuerdo, pero como en todo lo demás no lo saben), pintar todas las calles con Dios el de Jesús, y cruces, y la paloma... (para mí que pudiera ser propaganda electoral subliminal... No sé. Lo bueno, que Rouco Varela me dejará entrar en la iglesia y a misa los domingos por ser un abortista arrepentido de buena fe. Lo malo, que tengo que ir a Madrid. Malo o no que sería un intercambio cultural ¿? que los madrileños llevan todo el verano aquí. Hasta Julio Iglesias en paradero desconocido desde hace más de cinco años por el "Caso IVEX" está aquí... Paradero desconocido lo dice el juez instructor Luís Carlos Presencia Rubio... Vale que mi pueblo sea mi pueblo, pero mi país es mi país y eso sí que nadie me lo puede discutir). El día de la fiesta grande (no lo sé, un día cualquiera de esta semana) llenan las calles de pétalos de flores. En mi pueblo el arte nos sale por los ojos a borbotones. Sin embargo, no todos consideran que es arte. Los vecinos que tienen garaje lo consideran una putada. Mi hija dice que es arte del pueblo para el pueblo. Mi hija no sabe lo que dice... El que sabe lo que dice soy yo, que ayer fue el primer día festivo y el primero también de la música enlatada, pon, pon, pon, pon... hasta las siete de la mañana y tengo la cabeza pidiendo clemencia. Ay, no sabe lo que le queda a la pobre. Y a mí. (Esto sí que es una injusticia, Calimero).

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