viernes, 26 de enero de 2024

Asturias, si yo pudiera.

La mejor manera de conocer la cultura de un pueblo es por medio de la literatura. Franz Kafka, dijo: "La literatura es siempre una expedición a la verdad". Tal vez la verdad más profunda está esperando a ser rescatada por un escritor que luego la dé a conocer por medio de una obra literaria. Casi siempre la verdad se enmaraña entre la ficción que se atavía con elementos que están en la imaginación del escritor, que además la impregna de belleza narrativa (de soslayo no escapa a este axioma por defecto). Para conocer a fondo el mundo literario hay que leer libros a mansalva. Un escritor no lo es si no lee libros... A mí me chifla leer y publiqué libros (lo dije ayer), y en los dos se cumplió la sentencia de que "no hay libro malo que no tenga algo bueno" (por descubrir). Me apasiona escribir, pero me falta talento. Escribí un libro que narraba la compleja extracción del monocultivo del carbón. Un rollo patatero para quien no entienda la minería como cultura del pueblo. La certidumbre de unas comarcas mineras por alcanzar la justicia de la burguesía. La burguesía de siempre, pero aquella llevaba pistola en la cintura. De tanto encontrarse con la muerte bajo tierra, la minería del carbón asturiana se convirtió en leyenda. Nadie como los mineros asturianos para entender la lucha obrera. Pero ya no hay minas ni hay mineros. El carbón es historia, también la lucha obrera. Sin ejemplos, sin cultura, sin octubre del 34 para recordar, los obreros somos más pobres que nunca. Gracias.

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